4/30/2007







*Entrevista realizada a Casimiro Jiménez Medina en su domicilio en el municipio de Regla/Ciudad Habana el 9 de Octubre de 2005

-Donde y cuando nació
Nací en Santa Clara en 1912
-Hábleme de su infancia
Yo pasé una infancia dura porque cuando tenía unos ocho años me quedé huérfano de madre y de Santa Clara fuimos a vivir al campo y ahí mismo comencé a trabajar en un central azucarero que se llamaba San Antonio, eso era en el municipio de Villa Clara.Trabaje desde niño, sin ir casi a la escuela y ganando muy poco
-¿Aún tiene recuerdos de su infancia?
Mira yo fui un muchacho como muchos de allá, viviendo con lo justo, trabajando cuando se podía.Era un ambiente como muy familiar, donde nos conocíamos todos y vivíamos casi como ahora, solucionando cada día.Yo de aquellos años tengo sobre todo un recuerdo para el "Negro Nicolás"¡Mire, ese si era un tipo iluminado!
-¿Que quiere decir?
Que ese negro tenía unos 113 años cuando yo lo conocí y estaba completamente pero aún ciego veía todo.Resulta que el llegó a Cuba directico desde África, como esclavo,y después de pasar mucho trabajo pasó a ser un hombre libre.Era un hombre respetado porque el sabía cosas de la vida que los demás no lográbamos ni ver,de modo que a veces cuando había un problema que nadie sabía solucionar, Nicolás salía al paso, pero sin darse importanica.El no hablaba de sí mismo ni decía que tenía poderes ni esa cosa,pero realmente los tenía.Recuerdo que en una ocasión en que al pueblo de nosotros fueron a buscar a una mujer que estaba como loca y no paraba de dar gritos, Nicolás pidió entar con ella a una casa.La mujer daba unos gritos terribles y los soldados que la llevaban no se atrevían a soltarla pero Nicolás dijo que la dejasen a solas con él.Nadie sabe lo que ocurrió allí, pero salieron los dos como si tal cosa y a la mujer no se la llevaron.A mí ese negro me agarró cariño,porque yo era un niño pequeño pero tenía siempre la cosa de querer estar con él.Hubo algo que me dijo y que he recordado toda mi vida,sobre todo en España, donde la cosa se puso candela.El "Negro Nicolás" me dijo que yo estaba protegido de los peligros y que no habría de ocurrirme nada en la vida, vamos que moriría de viejo.Parece que acerto.Otra vez ocurrió que me quedé sin poder ni hablar porque yo estaba jugando junto al río y me caí, un río grande,y resulta que ese hombre,Nicolás,ciego y todo se tiró al agua y me sacó como si tal cosa.Era un hombre distinto.
-Háblame de sus trabajos y de las cosas que hacía en aquella etapa
Bueno, como ya le dije comencé a trabajar de muy niño y casi no tuve tiempo para otra cosa, primero como obrero azucarero y después fui ganando más categorías y trabajé de friega platos en un hotel ganando seis pesos mensuales
.Allí la cosa se complicó y tuve que volver a trabajar con mi padre con un camioncito.El era conductor de la "guagua" y yo fui "guagüero" también.Despues de esa etapa me fui de la casa a buscar trabajo y caminé hasta Santiago de Cuba,a pié por la línea del tren.Eso fue terrible, caminando sin parar y sin trabajo.Llegué a Bayamo y me empleé en un hotel en la cocina y como yo ya sabía algo era como un segundo cocinero y me pagaban doce pesos.Despues de un tiempo regresé a Santa Clara otra vez y me volví a emplear con el viejo.El me daba el diez por ciento de lo que hiciera la "guagua"
-¿Cuando empieza a tener conciencia política?
Bueno yo soy comunista desde que era un niño porque aquello era un "Ingenio" y había muchos españoles ¡oiga
, duro aquello! yo comencé con el partido con trece años, entonces yo trabajaba con unos bueyes llevándolos de aquí para allá y allí había tremendos comunistas.
-¿Como conoció a los primeros comunistas?
Bueno ellos me conocieron a mí.Había uno que se llamaba Hernández que era cubano y comunista y era el tenedor de libros.A mi ese hombre me cogió cariño porque me veía siempre sin zapatos y con las plantas de los pies hechas un puro cayo.A mi esa gente me conoció enseguida.
-¿Cuando empezó a tener actividad como militante?
Antes que todo eso, mis simpatías eran nacionalistas
¡antiimperialista vaya!Yo antes que nada empecé a darme cuenta de la explotación pero sin estar en el partido todavía.Recuerdo que una vez siendo yo guagüero resultó que había una huelga de costureras en Santa Clara y yo era jovencito pero impulsivo, me gustaba el deporte y me metí en los "trainer"como boxeador, aprendí a boxear un poco y como te dije, siendo guaguero,a las mujeres les cayeron a golpes en una huelga que tenían y como no me gustó que le pegaran a las mujeres me tiré de la guagua y le entré a golpes a un policía y allí mismo me prendieron y me llevaron.Por suerte, tenía yo un tío que tenía vara alta en la política tradicional.Se llamaba José García y gracias a él no pasó nada y el policía se quedó con los golpes, pero entonces empezaron los estudiantes y la juventud de aquella época a calentarme.Uno que se llamaba Luís de la Torre era oposicionista y terrorista y el tipo se fijó en mi.El ponía bombas y hacía sabotajes y yo comencé a poner bombas junto con los muchachos esos.
-¿De que época estamos hablando?
Por el año treinta creo.Esa era la dictadura del "machadato".Esos muchachos me hablaron, que si los nacionalistas somos esto,que si somos lo otro y ahí me empezaron a hablar del Partido Comunista y ahí yo empecé a cambiar,ya dejaba de ser terrorista, me agarraron los muchachos de la Liga Juvenil Comunista y en 1931 ingresé allá.Empecé a leer mucho y me vinculé al marxismo leninismo.Ocurrió que yo fui fundador de "La Liga" en Las Villas porque el partido se fundó en 1926 y estaba creciendo.Como yo era un muchacho arriesgado que no tenía miedo la liga me ascendió enseguida y me dieron distintas tareas.Me recuerdo que en esas fechas hubo una gran manifestación en la calle Máximo Gómez y yo le entré a un policía con un tanque de basura y se lo metí por la cabeza.Allí murió Milton Milian que era un gran compañero.Su entierro fue uno de los más grandes que se vivieron en Santa Clara
-¿Como fue el paso al Partido Comunista desde "La Liga"?
Bueno, siendo de la juventud me dieron trabajo de comisario para organizar a los obreros azucareros porque en una reunión de la Internacional Comunista pidieron al partido que actuase para orientar a los obreros azucareros porque esta era la principal industria del país.Allí ya era del Partido Comunista.Recuerdo que a veces convocábamos una reunión clandestina y se presentaban doscientos.Yo siempre quería que eligieran a otra gente pero me nombraban siempre a mi.
-En su actividad revolucionaria ¿sufrió muchas persecuciones?
Permanente.Yo he estado preso que ni se sabe....setenta y tres me parece.Una vez los guagiros, en una de esas movilizaciones, cargaron a caballo con machete en mano contra la Guardia Rural y yo los arengaba.Esa era la situación más o menos de aquella época.Era una época muy dura, mis muchachos pasaron hambre, la mujer comió harina y yo me mantenía en el Partido.
-Hábleme de la represión de aquellos años
Pues mira cuando venían aquí los americanos con los caballos grandes esos y salían a pasear por la ciudad de Santa Clara, metían a muchos presos.A los presos nos llevaban al cuartel con cualquier excusa, que si éramos revolucionarios, que si lo otro...Yo tuve suerte porque me daban un trato algo distinto; un día recuerdo que estaba yo preso, me tenían castigado con unos sacos de cemento
,encerrado en un cuarto y moviendo los sacos de un lado a otro.Me tenían fatal, haciendo mis necesidades allí mismo y en un descuido les boté todo el agua del tanque y pinté lemas en toda la galera,"abajo el gobierno" y otras cosas.Entonces fue que vino el jefe del regimiento y cuando vio como estaba dijo que me llevasen al comedor para que me diesen almuerzo.Despues pidió que me liberasen.La verdad es que me distinguían.Todo esto podía estar ocurriendo como en 1926 cuando Machado tomó el Gobierno
-¿Como termina esa etapa suya en Santa Clara?
Tuve que irme.Me detenían continuamente y me amenazaban por mis actividades revolucionarias.Una vez que me fueron a buscar a mi casa creo que para matarme, me salvó un tío, un tío político que era amigo íntimo de Machado .Cuando se enteró de que yo estaba preso y que mi vida corría peligro llamó allá y vino el hombre para Santa Clara, llegó y ¡me soltaron compadre!El ingenio quebró y yo me quedé allí mismo con el viejo.Yo ya sabía que tenía que irme porque si no me mataban.Yo tenía unas amistades que eran los padres de Barbarito el cantante y la esposa,Dulce María, que era una mulata muy linda que me vio cuando me sacaron del cuartel,me vio que estaba de pena.Ella observó que tenía los pies en carne viva y me dijo que tenía que curarme,de modo que ella misma me curó arancandome la piel de las plantas de los pies.Cuando me curó esta mujer,me arrancó una piel que parecía la de un animal.Yo tenía los pies así de pura pobreza sin plata siquiera para zapatos.Pero mis problemas seguían igual porque empezó una etapa que no estaba bien en ningún sitio,perseguido por todas partes de modo que me fui no se sabe muy bien a donde.Entonces fue que me junté con muchachos de esos que no tienen comida y esa cosa....pasé un hambre del carajo.Recuerdo que llegué a un café,pedí un vaso de agua,me tomé el vaso de agua y me caí.Por suerte había cuatro médicos sentados en ese bar y uno de ellos me atendió y me hizo un tratamiento en el cerebro porque lo tenía perjudicado,me dieron de comer y me trataron muy bien.Recuerdo que me llevaban al morro de oriente y me sentaban allí para que me diese el aire.Yo enfermo y todo me daba cuenta de que allí mismo a cuatro o cinco kilómetros había un barco americano.
-¿Como vive la caída de Machado?
Todo el mundo sabe que tras la caída de Machado la revolución se fue a Holgín.Allá en oriente nosotros luchábamos por la revolución obrera de los campesinos apoyados por soldados y marinos y entonces,allí,en las tierras de oriente se lograron consolidar los soviets.Era un movimiento tan poderoso que a los imperialistas les suponía una seria amenaza.Ya te digo que los guajiros estaban dispuestos a cargar al machete, era una situación que de haberse dado las condiciones podíamos haber tomado el poder, pero hubo mucha represión,muchas torturas.Fué una lucha titánica.Ahí yo ya era un comunista consciente, ya estaba en el Comité Provincial del partido.Fue en esa etapa cuando cambiamos la táctica y creamos organizaciones semilegales y con esas organizaciones creamos un bosquejo de la Confederación de Trabajadores de Cuba,se fue formando un amplio bloque opositor y cuando eso, la dictadura ya no estaba tan dictadura
-¿Como recuerda el inicio de la guerra civil en España?
Aquello se esperaba porque los fascismos estaban fuertes en Europa y lo de España era una revolución y tenían que frenarla.Aquí se organizó un movimiento muy grande, además de los españoles que eran republicanos las organizaciones de aqui se movilizaron muy rápido, se volcaron en defensa de la República española.Yo en las Villas tenía ya mucho prestigio por mi trabajo revolucionario,de modo que me encargaron la tarea de buscar gente para ir a la guerra española a luchar contra el fascismo.De aquí fueron muchísimos porque no es que sea mi pueblo pero es que Las Villas era una de las provincias más revolucionarias de toda Cuba en todas las situaciones.Era una gente del carajo
-Usted fue responsable de reclutar compañeros
Si, el ,partido respondió al llamado de la Internacional Comunista, de la Komintern y empezó a buscar voluntarios para pelear allá, pero muchos no eran comunistas, eran gente que tenía una ideología de izquierdas o democrática y que quería pelear contra el fascismo.Cuando ya vino el triunfo del presidente Roosvelt en los Estados Unidos, en lo político, aquí se formó un bloque muy amplio con los movimientos de izquierda y los trabajadores y en esa situación la dictadura ya se había suavizado mucho.En Cuba se produjo un hecho y es que hubo un Embajador mexicano que se llamaba Romero que parece que era un agente yanqui.Ese embajador tuvo una gran influencia sobre Batista que dio una serie de pasos que mejoraron nuestra libertad de acción.A Batista nosotros le llamábamos la "realidad determinante" porque era el quien mandaba y el presidente era un pelele.Estabamos ya en 1938 y en ese tiempo sonaba mucho un canto español "No Pasarán" y lo ponían en las vitrolas,algunas veces se formaba bronca por poner ese disco pero la gente tenía con eso como un escape.La solidaridad con España desde el primer momento fue una solidaridad muy activa.Primero empezamos apoyándolos moralmente y después con ayuda material, pero el cubano es el cubano y es internacionalista por naturaleza, nosotros los cubanos no entendemos el internacionalismo como una cosa sobre el papel sino con la sangre en las manos, como la parte más alta del desarrollo de un revolucionario que es tomar el poder y desplazar de él a la burguesía con las armas en la mano y ayudar a la libertad de los pueblos.No fuimos sectarios como
comunistas en ese problema porque no era un gobierno comunista el que estábamos defendiendo sino al gobierno del Frente Popular, progresista, y apoyábamos a ese gobierno
-A usted le negaron varias veces su inclusión entre los voluntarios
Si bueno eso fue porque el partido era chiquito y todo el mundo no podía ir para España.Resulta que cuando yo decidí pelear en España el organizador del partido era Fabio Golobart y el decía que yo era muy activo y que hacía falta aquí.Mi primera intención fue la de irme pero el partido me hizo responsable del reclutamiento en la provincia, luego
,pasados unos meses yo decidí que tenía que estar junto con los hombres que yo estaba reclutando.Hablé con Golobart y le dije" yo estoy reclutando gente para España, para que vayan a pelear, pero yo no soy capitán araña".Yo no podía ser "capitán araña" ,mandando a la gente a pelear y quedándome yo en Cuba y aunque el partido se oponía, paso un hecho, que vine a La Habana a discutir con Fabio que yo me quería ir y de nuevo me dijeron que no,que yo tenía que quedarme, pero yo siempre fui bastante cabezón.
-¿Decidió viajar a España sin permiso del partido?
Si así fue, la lucha contra el fascismo era más importante que la disciplina en ese momento.Me volví a Santa Clara y empecé a disponerlo todo para la marcha.Me ocurrió una anécdota muy curiosa y es que fui a sacar la inscripción de nacimiento para la cosa del pasaporte y fue entonces que me enteré que mi nombre es Casimiro.Yo me llamaba Roberto y toda mi familia, los compañeros, mí esposa, todos me llamaban por mi nombre,Roberto,pero resulta que en la inscripción ponía Casimiro.Al final nos enteramos que cuando mi papá me fue a inscribir decidió en el último momento que el trámite lo hiciera un amigo al que le dio el papel pero este lo extravió,entonces fue que mi papá le dijo que me pusieran como mi abuelo, Casimiro Ramón,y así lo hizo pero todos estábamos en que me habían puesto Roberto que es lo primero que dijo mi padre.A partir de entonces me llamo Casimiro.Mi mujer supo eso casada ya, fue solo una anécdota
-¿Cuando partió?
En 1938,me parece que en el mes de mayo, lo que si me acuerdo es que embarqué en el "Reina del Pacífico",un barco con bandera inglesa.Nos despidió el buró político del partido.Yo me las arreglé para tener el pasaje en esa expedición porque yo era uno de los responsables del reclutamiento.Fabio llegó a subir a la cubierta del barco para pedirme que no me marchara pero le dije que ya había tomado la decisión de pelear en España.Fué de las pocas veces en mi vida de militante que fui indisciplinado pero por fortuna no me expulsaron del partido.El viaje fue una paliza, muy pesado.Yo recuerdo que llevaba tabaco y pude pasarlo, porqué en la aduana nos lo quitaban.Yo le di algo al que controlaba y le dije "coge" y el hombre,agradecido,me dio la mano y no me quitó lo que llevaba
-Hábleme de la llegada a Francia
Pues llegamos a un puerto que se llama "La Pallice" que quiere decir la paliza y los compañeros de Francia nos estaban esperando para acompañarnos al tren que nos tenía que llevara hasta París, la capital de Francia.En París estuve nueve días.
-¿Que recuerda de París?
Aquello era lindo, lindo de verdad, aquello era un sueño.Había un montón de carreteras que lo comunicaban todo muy bien.Luego se dio otra casualidad; a mí me gustaba boxear, no me cotrataban pero boxeaba con los boxeadores y los entrenadores y entonces me encontré con un tipo que era campeón cubano y campeón mundial y que vivía en París, tenía un cabaret allí y se había casado con una mujer que era blanca.Cuando me vio me dijo¡coño,que clase piedra llegó aqui!Cuando le dije que iba para España me dijo ¡tu eres un comemierda,te van a matar,quedate conmigo aquí coño!.Tenía un cabaret y me dijo que escogiera la cubana que yo quisiera, figúrate tu.....de ahí salí para España
-¿Como fue la entrada en España?
Bueno yo entre vestido de civil por un lugar que se llama Port Bou después de cruzar los pirineos, me llevaron junto al resto del grupo al, sitio al que iban todos los voluntarios que cruzaban por Francia, al Castillo de Figueras.Allí lo primero que hacían era darte ropa de militar, un pantalón y una camisa, había que escoger las tallas porque te las daban cambiadas y también me dieron una muda de ropa y zapatos y todo.
-¿Recuerda a alguno de los compañeros que llegaron con usted?
Y soy bastante viejo y me falla la memoria, solo me acuerdo de algunos, Manolo del Peso, Mario Morales, Basilio Cueira, Julio Cueva, Pompilio Viciedo y otros muchos que no recuerdo
-Pasó unos días en Barcelona ¿lo recuerdo?
Bastante bien.Es una ciudad muy linda y había un gran ambiente revolucionario en las calles.De lo que más me acuerdo es de aquello de "Barcelona es bona si la plata sona"
-Hábleme de su paso por las Brigadas Internacionales
Había compañeros de todo el mundo, norteamericanos, italianos, ingleses, alemanes....de todas partes.Nosotros los cubanos éramos los mejores,
teníamos mucha disciplina y una gran conciencia política.
-Hábleme de esa disciplina
Había mucha disciplina, disciplina moral.El cubano, tu sabes que es "guapo" por naturaleza, y siendo "guapo" es más disciplinado que otros como los alemanes o los rusos.Tenemos fama de juerguistas pero demostramos que un cubano es mucho más que eso.Para mantener las condiciones que nos llevasen a la victoria la disciplina era obligada y se dieron muchos casos en los que se aplicó con severidad, pero era necesario.
-¿Con que graduación combatió?
Yo fue cabo pero en realidad también tenía una tarea política porque era secretario del Partido Comunista de España en la Compañia.Más tarde cuando el cruce de la frontera asumí más responsabilidades
-Pasó en total nueve meses combatiendo ¿Hábleme de esos días?
Pues el primer saludo que nos dieron nada más llegar a Figueras fue un bombardeo.Yo llegué en el último tramo de la guerra y combatí en el Ebro y luego lo que fue todo el repliegue hasta la retirada.Lo de el Ebro fue una batalla tremenda, allí murieron muchos cubanos.Peleé en Gandesa y en una serie de pueblos donde estaba fijada la línea del frente.Fijate que estando allí en el Ebro combatiendo se decidió la retirada de los internacionalistas de España.Yo había llegado a España a finales de mayo y en septiembre ya nos dijeron que nos teníamos que ir, pero no nos fuimos, seguimos combatiendo en unidades españolas.Aunque a las Brigadas Internacionales se las retiró de España, los italianos, alemanes y moros siguieron combatiendo con Franco así que nosotros seguimos allí
-¿En que unidad combatió?
A mi me enviaron a la compañía de ametralladoras del 59 Batallón, 15 Brigada, 35 División del 15 Cuerpo del Ejercito del este, el jefe de nosotros era el coronel Pedro Mateo Merino.
-Al final se integró en una unidad del Ejercito Popular
Se nos pidió que continuásemos la lucha al lado de los españoles y en mi batallón en la 15 Brigada todos dimos un paso al frente, todos menos uno.En la batalla del Ebro fallecieron muy buenos compaños, pero si duro fue el Ebro, más dura fue la retirada.
-Hábleme de la retirada
Yo peleé en no se cuantos pueblos en esa retirada porque nosotros los internacionalistas teníamos que aguantar el empuje de las tropas enemigas para dar tiempo a la retirada de la población civil y del ejercito regular que se veía cada vez más embolsado.Recuerdo que en este repliegue continuo llegamos hasta Barcelona y allí nos tiraban desde las azoteas porque había gente emboscada allí esperando la llegada de las tropas para atacarles a su paso por la ciudad.Nosotros buscábamos los portales de los edificios para guarecernos pero fue bien peligroso aquellos porque los francotiradores hacían blanco con bastante facilidad.Había alguna gente de los nuestros que se camuflaba y que cuando parábamos soltaban los fusiles y se vestían de paisano.Peleé también en Granollers en un lugar que se llama La Garriga,porque el empuje era tremendo y había que replegarse a tiro limpio.La situación se había hecho insostenible y ahora lo que se buscaba era evacuar a los civiles de la forma más ordenada posible....que orden no hubo ninguno.Recuerdo ahora que defendiendo esa posición de La Garriga peleé junto a unos compañeros muy valientes que luchaban a las ordenes de un comunista brasileño llamado Luís Carlos Pertis,un comunista de verdad.Recuerdo aquello como si estuviese ocurriendo en este tiempo......venían doce tanques y nosotros estábamos resistiendo para dar tiempo al repliegue del nuestro ejercito.Fue en eso que este capitán brasileño me dijo" venga conmigo",y salimos con bombas de mano a por aquellos tanques.Eran unas tanquetas italianas y logramos reventarles tres o cuatro hasta que desistieron en seguir avanzando por aquella carretera....pero por poco tiempo porque eso era ya en plena derrota.En adelante me encomendaron tareas de sabotaje y de inutilización del propio armamento para que no cayese en manos enemigas, volando campos de aviación y destruyendo aviones.Poco antes de cruzar a Francia, en esas últimas semanas en España la situación de nuestra tropa se deterioró mucho porque estábamos destrozados y hambrientos.Recuerdo que aquello fue una huida continua por aquellos pueblitos, cubriendo la retirada del ejercito y pasando pena para contener a aquella fuerza tan desproporcionada que nos estaba dando caza.Me recuerdo que en una de eas,llevabamos como seis días sin quitarnos las botas, no había almuerzo y estábamos muy flacos, con muy mal aspecto, de modo que lo único que podíamos hacer cuando no estábamos disparando era tirarnos a dormir.Estando así,una mañana sentimos música....eran los polacos que cantaban música y tenían el mismo mal aspecto que nosotros,flacos,deslucidos,pero pasaron marchando y cantando, entonces nosotros nos pusimos en macha e hicimos lo mismo, marchar cantando en formación.El comisario que acompañaba a aquella tropa nos pidió que acudiésemos a un pueblito llamado Casal de la Selva en el que estaba resistiendo el Coronel Llanos que pedía refuerzos con desesperación porque ya habían matado a muchos de los suyos.Fue entonces que nos mandaron unos camiones que nos trasladaron a ese pueblo y allí aguantamos tres días hasta que pudo cruzar el ejercito de la República.Desde allí nos enviaron a Angosteras.Una vez allí nos dijeron que el frente estaba a treinta y cinco kilómetros.Allí se concentraron los restos de la 35 División con la orden de resistir a cualquier precio porque había que aguantar al enemigo para dar tiempo al cruce de la frontera de los últimos que habían llegado desde Barcelona y los pueblos de alrededor.Hasta Angostera llegó una avanzadilla de tanques fascista pero nuestra preparación antitanques logró envolverlos e inmovilizarlos de modo que no pudieron pasar de aquel pueblo.Recuerdo que por la noche entramos en una iglesia que estaba llena de paja y conseguimos una gallina a la que estuvimos dando candela en una tinaja que estaba llena de aceite.Despues metimos a la gallina en agua durante cinco horras pero contra más candela le dábamos más dura se ponía la gallina y estando en ese trajín fue cuando sonaron los cañonazos y empezó la bronca.La suerte de nosotros es que había una compañía de los países nórdicos que aguantaron el primer golpe y después nosotros nos posicionamos y ya no pudieron entrara en el pueblo, pero por la retaguardia nos atacó la caballería fascista que a punto estuvo de coparnos, pero logramos romper ese cerco.Había un italiano al que le decían Toni que era de la Compañía de nosotros y que era la alegría de la División.Se trataba de un tipo alegre que tocaba el acordeón y donde el se encontraba estaba la alegría.Ese hombre calló herido allí en esa encerrona de Angostera.A mi me quedaba un solo muro de la ametralladora, entonces lo cogí y lo encaramé al muro pero el italiano se caía porque estaba herido en las dos piernas,entoces le dije" yo te llevo, pero te voy a llevar a mi manera" y le amarré las manos y los pies y lo dejé así con la cabeza para abajo.Me lo eché encima y para poder escapar tuvimos que salir a aquellos pantanos.En esos pantanos había unas matas a las que llaman alcornoques que son esas que dan el corcho.A mí aquellas matas que estaban peladas me parecían gigantes, así como a Don Quijote de la Mancha, fue una sensación terrible.Pude conseguir una botella de coñac y me metí media botella en el cuerpo.En esa huida se formó una matazón enorme porque teníamos a los moros ya encima y nos gritaban ¡rojillo suelta la fusila!.Allí vi morir a un gran comunista, Pablo Dantón, un hombre de gran ideología y de acción cuya muerte sentí muchísimo
-¿Logro salvar a su compañero italiano?
Si, era una norma de oro entre los internacionalistas, que no podíamos dejar a ningún compañero atras.A Toni logré montarlo a un mulo y así llegamos a un río.Ibamos ya como seis hombre en esas huida y yo dije que el herido tenía que pasar con mulo y todo.Yo pasé adelante tirando del mulo y el resto de los hombres lo hicieron a ambos lados del mulo para compensar el peso.El mulo no quería pero tuvo que ser equilibrista pero al final pasó.
-¿Como recuerda el momento final, el cruce de la frontera?

Con mucha tristezazo creo que fue en la única ocasión en la que sentí miedo de verdad porque estábamos ya a vista de la frontera que se veía como con unos puntos blancos que eran los mojones que delimitaban el paso.Yo veía esos puntos blancos desde una pequeña loma desde la que también veía como se aproximaban seis tanques que estaban apoyados por fuego de mortero.Sentí miedo a morir en la orilla, pero no lo demostré.Me dio idea jalar la maquina y correr a la frontera pero de pronto me dio más miedo ser un cobarde y me acordé de Mella.Entonces me dispuse a morir antes que ser un hombre sin honor.
-¿Se mantenía la disciplina en esos momentos?
Manteníamos la disciplina pero había muchos nervios entre los combatientes.Yotuve un incidente con un Coronel que me faltó al respeto y yo hice lo mismo con el,entoces la cosa se calentó y el tipo sacó su pistola y jaló y yo saqué la mia y jalé también.Aquello fue una situación de gran tensión porque me dijo "mentira,tira tu" y yo le contesté que si tenía cojones que lo hiciera el.Aquello terminó en disculpas pero te hacer ver como estaban los nervios de aquellos hombres que veían Francia a un lado y a los tanques del enemigo al otro.
-¿Cruzó en el último minuto?

Sin duda.Nos aproximamos hasta una distancia de medio kilómetro hasta que ya se veían los mojones de concreto perfectamente.Se veía la tierra de nadie y Francia pero para llegar hasta allí había que atravesar una carretera que podía caer en manos del enemigo en cualquier momento.En esto pasó un camión y lo paré aún sabiendo que si querían emboscarme lo harían facilmente.No pudimos subir a aquel camión pero al menos nos informó de que no cruzáramos por Port Bou porque aquello estaba encendido, que lo hiciéramos por Puigcrda que no estaba demasiado lejos.Al final ese fue el lugar por el que abandoné España.

-¿Fue directamente al campo de concentración?
Bueno primero estuvimos como un día en un llano donde no había ni agua.Allí nos retiraron el armamento y todo lo que pudieron porque eran tremendos aquellos senegaleses.Me llevaron como a la mayoría de los Cubanos al campo de concentración que habían improvisado en la playa de Argeles Sur Mer y allí pasé casi cuatro meses en condiciones penosas pero con una gran camaredaría porque los cubanos organizaron rápidamente la cosa para hacer más llevadera la espera hasta que pudiésemos salir de aquel infierno.Dormíamos en huecos que hacíamos en la arena y cubríamos con cualquier cosa para protegernos del viento y la lluvia y un frío terrible.De la comida ni te cuento y las condiciones de higiene y esas cosas eran realmente deprimentes porque apenas teníamos un puesto de socorro para todo el campo que llegó a contar con más de 200.000 prisioneros.Yo lo que peor recuerdo era el trato despectivo que nos daban los soldados senegaleses que estaban encuadrados en el ejercito francés porque en ese tiempo Senegal era colonia de ellos.¡Esos negros eran malos con cojones compadre!.Me recuerdo la, ocasión en la que les vendimos un saco de zapatos pero tu sabes como era aquel saco! de una sola pata compadre,de manera que andaban buscando como locos a quien les vendió aquello.En alguna ocasión pagaron cara su crueldad porque les tendíamos trampas.Despues del primer mes aquello mejoró un poco sobre todo en la comida, además nosotros teníamos cocina propia y hasta un saco de patatas.Además,los cubanos hicimos una casa con lo que pudimos,y allí con materiales de la basura hicimos una bola del mundo en la que se veían todos los países y los dos hemisferios....todo era bueno para entretenerte.Para cagar había que meterse en unas tablas para adentro,para el mar, llegaba la ola y te hacía "bam"...no tenías que lavarte el culo

-¿Cantaban canciones?

Si claro, los cubanos estábamos siempre con la cosa de la música, pero además con nosotros estaba Julio Cueva el músico, que compuso una canción que se llamaba Allé Allé Reculé que hablaba de los senegaleses y de las golpizas que nos daban.La cosa subió de tono y cuando ellos nos daban terminábamos dándoles también a ellos de modo que en las últimas semanas los quitaron de allí.
-¿Mataron a alguno?
Como a cuatro o cinco

-La salida, cuénteme lo que recuerda de la salida del campo.

Vino la Cónsul de nosotros en París a decirnos que en Cuba la cosa se estaba organizando para sacarnos.Entonces Manolo Ortega que era un muchacho y no tenía papeles ni un carajo era el que tenía el problema más grande pero nosotros logramos meterlo en el grupo.Sabíamos que la política en Cuba estaba cambiando y que había una gran movilización para nuestra vuelta.Además el Gobierno francés dio facilidades porque lo que quería era quitarse de en medio a tanto prisionero, ellos lo que querían era quitarse ese lío de arriba porque no querían tener esa carga allí
-¿Cuando volvió?

En mayo de 1939.Fue el momento más emocionante de mi vida cuando llegamos al puerto de La Habana y pude ver la bandera cubana y al pueblo de La Habana esperando a sus combatientes.Lloré sin poderme contener.Yo solo he llorado tres veces en mi vida,una cuando mataron a Jesús Menéndez, el líder sindical azucarero del que yo era guardaespaldas.Lo asesinaron y yo no estaba allí para evitarlo.La otra fue tras la victoria en Girón contra los yankis.En el puerto de La Habana lloré desconsoladamente,por la emoción, por la derrota de la República y por los cientos de compañeros a los que ya no vería nunca

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