4/30/2007


INTRODUCCION

La guerra civil española siempre ha ejercido en mí una curiosidad que con los años se convirtió en fascinación,posiblemente algo tenga que ver el ser hijo de una malagueña que con ocho años huía por la carretera de Almería a la entrada de las tropas italianas en Málaga.Algo parecido me ocurre con Cuba y su historia en común con España, de modo que cuando la "red", que todo lo puede puso ante mí un artículo del diario Granma en el que se hablaba de un homenaje a los combatientes cubanos que lucharon en la guerra civil española, sentí necesidad por conocer detalles de todo aquello.Yo había leído algunas referencias a cubanos en la guerra civil pero nunca dejaron de ser casos concretos, sin embargo este homenaje que se tradujo en un modesto y digno monumento en el Muelle de Luz de La Habana, hablaba de un contingente importante de voluntarios y lo que era aún mejor,en este acto que tuvo lugar el 4 de diciembre de 2003,había supervivientes.Ese fue el origen de esta investigación que me ha llevado a conocer y entrevistar a estos hombres y reconstruir su paso por España a través de sus testimonios para lo que me trasladé a Cuba y recorrí los mismos escenarios que protagonizaron su gesta.
Para el conocimiento de estos hechos existen algunos trabajos imprescindibles pero todos ellos publicados en Cuba donde la presencia cubana en la guerra civil española es comúnmente conocida y difundida a través de libros, artículos y desde mediados de los años noventa cuenta con un foro permanente, el centro "Pablo de la Torriente Brau" que promueve publicaciones y encuentros sobre esta especialidad.Desgraciadamente el archivo que los veteranos cubanos de la guerra civil española han mimado durante más de cincuenta años a través de la asociación de "Voluntarios Cubanos de la guerra civil española" quedó definitivamente desgajado tras el fallecimiento de su último presidente Mario Morales y de su secretario Aneiro Subirat,últimos miembros que custodiaron;posteriormente sus familias los entregaron a historiadores y periodistas que se interesaron por el tema o sencillamente desconocen su paradero.Esta investigación se basa por tanto en testimonios y en los documentos que estos supervivientes han aportado, en el de los familiares de muchos de los ya fallecidos y en todos aquellos documentos que han podido ser localizados.De entre todos estos destacan los aportados por Ramón Nicolau que fue el responsable del reclutamiento y presencia de los voluntarios que partían desde Cuba y que posteriormente fue el responsable del Instituto de Historia de Cuba,desde donde impulsó una publicación monográfica sobre este tema al cumplirse los cuarenta años de la guerra civil española; un libro de entrevistas y testimonios definitivo para el conocimiento de estos hechos.En los años noventa,historiadores como Alberto Alfonso Bello,Victor Joaquín Ortega y otros ayudaron a mantener viva la memoria de estos hechos, algo que no ha ocurrido con los especialistas en la guerra civil española que desde España y otros lugares del mundo han profundizado en la presencia internacional en la guerra española pero no han profundizado en el contingente cubano.El número de voluntarios es otra de las asignaturas pendientes con la dificultad adicional que supone conocer el número de voluntarios que se alistaron directamente en unidades del "Ejercito Popular" sin mantener relación alguna con las organizaciones cubanas que trabajaban en esta tarea.Todos los trabajos sobre el asunto hablan de una cifra en torno al millar de combatientes.

Para una mejor compresión de la presencia de estos voluntarios cubanos en España he recogido una síntesis de la historia de Cuba desde su independencia hasta el inicio de la guerra en España.Se trata de un acercamiento al proceso político y social de la que fue última colonia española que solo treinta y ocho años más tarde de lograr su independencia de ,defiende con su sangre a una parte de la España en guerra, la España leal.Otro capítulo está dedicado al movimiento revolucionario cubano y su etapa de gestación como embrión de lo que con los años se convertiría en el único país latinoamericano en el que se instalase el marxismo como referente político, un capitulo determinante para conocer el ambiente y las condiciones de vida de la mayoría de los voluntarios que antes de marchar a España estarán encuadrados en el movimiento estudiantil, en las organizaciones obreras o en los grupos políticos de oposición a las feroces dictaduras que soportó Cuba y a los constantes gestos injerencias tas de los Estados Unidos.Los cubanos que luchan en España pertenecen a diversas tendencias políticas pero todos tienen algo en común, son antifascistas y antiimperialistas también se relata el definitivo papel del Partido Comunista de Cuba que tras el llamamiento de la Komintern para el envío de voluntarios a España actuará como vínculo entre estos y las organizaciones que se ocuparon de su traslado, su paso por Francia y la entrada generalmente clandestina en España y una vez allí su alistamiento en las Brigadas Internacionales, aunque como se verá en adelante, no solo en estas unidades lucharán los cubanos.

Otro aspecto en el que he querido profundizar es la relación entre ambas naciones desde el inicio de la guerra, el papel jugado por Cuba que adoptará una posición de "neutralidad activa" que pasará por diversos posicionamientos como su propuesta de arbitraje hispano en el conflicto español y sus oscilaciones hacia los diplomáticos republicanos en Cuba o los representante oficiosos del gobierno de Burgos en la isla.Se destacan también las actividades de la colonia española en la isla durante la guerra, con organizaciones republicanas y falangistas que provocarán corrientes de opinión y debates mediáticos que calarán profundamente en una sociedad cubana que había vivido momentos de euforia solo tres años antes con la caída del Presidente Gerardo Machado y la creación de un gobierno de tendencia izquierdista que durante unos meses llevará a cabo un programa de reformas en el que podemos encontrar similitudes en las adoptadas por el gobierno de la Segunda República en España.También es analizado el papel de la diplomacia cubana en España durante el conflicto con una intensa labor humanitaria traducida en asilo político en sus sedes de docenas de personas,fundamentalmente partidarios de los alzados, aunque al final de la guerra también darán asilo a partidarios de la República.Se destaca también la labor de estos diplomáticos en lo que a canje de prisioneros entre ambos bandos se refiere y en la repatriación de los cubanos apresados en los campos de concentración franquistas al finalizar la guerra.
Las organizaciones de ayuda a la España republicana alcanzan tal fortaleza durante el tiempo que dura el conflicto que llegarán a ser el auténtico motor de la oposición cubana que había constituido una asociación para la ayuda material a España en la que también se trabajó en la propaganda.Se produjeron importantes envíos de alimentos,medicamentos,tabaco y otros útiles, se creó una colonia infantil en Sitges con el nombre de "Casa Cuba" y en general lograron mantener la tensión sobre la guerra española en la sociedad cubana a la que llegaban no solo mensajes de solidaridad hacia España sino que también de repulsa hacia el Gobierno cubano y la ausencia de libertades políticas, una circuntastancia que variará sensiblemente en el tiempo que dura la guerra en España.Sin embargo aún siendo importante la ayuda material y moral, será determinante la aportación de voluntarios para la lucha en España, tarea que se desarrollará en condiciones de clandestinidad y persecución por parte de las autoridades cubanas y que será posible gracias a la estructura del Partido Comunista Cubano, tan joven y pequeño como el español pero con el mismo nervio y capacidad de organización.Serán los comunistas los que se encarguen de organizar los grupos de voluntarios que aún siendo de distintas tendencias políticas son absorbidos por la estructura de la Komintern desde su llegada a Francia, siempre con cuadros comunistas al frente de los grupos.
Aunque ha sido difícil elegir entre estos voluntarios, he decidido optar solo por algunos de ellos y profundizar en su biografía y su paso por España.Respecto de los supervivientes, su avanzada edad les ha permitido narrar sus recuerdos de forma desigual,si bien cuatro de ellos mantienen bastante vivos estos hechos y solo se ha corregido su testimonio en aquellas lagunas mentales que han podido ser contrastadas en anteriores testimonios suyos y en documentos que obran en su poder.Tambien he respetado sus expresiones y en lo posible su español de cuba.Desgraciadamente solo Pablo de la Torriente suele sobresalir como representante de los "voluntarios de la libertad" cubanos;a través de estas páginas podrán conocer la singularidad de otros muchos que dejaron su vida en España o tuvieron una actuación significada.Con la llegada de la Revolución en 1959,muchos de estos veteranos pasaron a formar parte de la élite política como Ramón Nicolau,Mario Morales ,Manuel del Peso o María Luisa Lafita,sin embargo la mayoría retornó a sus empleos y su paso por los frentes españoles no fue del dominio general hasta que a los cuarenta años el gobierno cubano les concediera a los supervivientes la medalla que distingue a los combatientes internacionalistas y les considerase como los pioneros en esa labor revolucionaria que ha llevado a los cubanos a luchar en distintos continentes desde el inicio de la revolución socialista en la isla.En España estuvieron cubanos de una tremenda talla intelectual como Juan Marinello o Félix Piíta músicos de primer nivel como Julio Cuevas o gansters de siniestro recuerdo como Rolando Masferrer que fue voluntario a España y fue herido en una pierna por lo que con los años, cuando se convirtió en jefe de la temida banda mafiosa conocida como "Los Tigres de Masferrer" pasó a ser conocido como "El cojo Masferrer".
Por último no he querido dejar de relatar los tormentos de los combatientes cubanos en los campos de refugiados que los franceses habilitaron a toda prisa para alojar a los republicanos españoles que se vieron obligados a dejar el país a final de la guerra.Los cubanos protagonizaron iniciativas singulares en estos campamentos, fugas y composiciones musicales incluidas, como la que da nombre a este libro y que en definitiva pasó a convertirse en un símbolo de la resistencia de estos cubanos que pasaron un promedio de cien días prisioneros en las playas de Francia.

"Allé,Allé Reculé".Combatientes cubanos en la guerra civil española,pretende contribuir al conocimiento de la gesta de estos voluntarios cuyos supervivientes, setenta años después de estos hechos siguen mirando hacia España, no como el país que los colonizó sino como aquel que les permitió luchar contra el fascismo.España les reconoció el derecho a la ciudadanía en 1996 en un gesto político de circunstancias que no hace justicia al sacrificio de los extranjeros que llegaron a España a defender al Gobierno Constitucional.Prueba de ello es el escaso interés que las autoridades diplomáticas españolas muestran hacia estos hombres a los que trata con la misma indiferencia que a los miles de cubanos que se acercan hasta las oficinas consulares españolas y de los que no tiene más conocimiento que el que difunden los medios de comunicación cubanos.
Conocer la hazaña de estos hombres y mujeres, quienes eran, porqué fueron y como discurrió su tiempo en España es en definitiva la razón de este libro.




CUBA UNA NACIÓN JOVEN

Durante al menos treinta años el pueblo cubano mantuvo diversos episodios de guerra con la Corona de España que como potencia colonial en declarada decadencia se aferraba al mantenimiento de "la mayor de las antillas" .Sabido es que España tenía en Cuba su última oportunidad de mantener su influencia económica y geoestratégica en la zona,sin embargo la realidad marcaba un imparable camino hacia la independencia cubana tanto en lo militar como en lo económico.Desde la década de los sesenta de ese siglo XIX los independentistas cubanos habían logrado organizar un "ejercito libertador" cada vez más sólido y afianzado instituciones propias como la "Asamblea de Representantes del Pueblo en Armas" y quizás lo más importante, habían generado un ideario liderado por el padre de la patria "José Martí" que sienta las bases del futuro de la nación y estructura un pensamiento político de amplio calado en los sectores independentistas que abrazan este instrumento sin fisuras.El Partido Revolucionario Cubano como norte y el ejercito Mambí como instrumento de guerra provocarán que en la última década del siglo XIX los independentistas sometan a la Corona Española a un empuje imparable.En los últimos años del siglo las tropas cubanas mantienen el control real de las provincias orientales.Este escenario es observado de cerca por Estados Unidos que desde la década de los sesenta fuerza una gran penetración económica, de modo que van sustituyendo las inversiones españolas en la isla por capital norteamericano sobre todo en lo que respecta a explotaciones agrícolas y mineras.

En este contexto ,los Estados Unidos despliegan a su Armada en diversos puntos del perímetro cubano bajo la excusa de posibles disturbios en la isla y el 15 de febrero de 1898 provocan el incidente del acorazado Maine,una nave que encontrándose fondeada en la bahía de La Habana hace explosión con 268 fallecidos como consecuencia y distintas versiones sobre lo ocurrido , aunque lo que es incontestable es que con este suceso, Estados Unidos tenía una excusa para entrar en guerra con España y así poder ampliar su ámbito de influencia no solo a Cuba sino que también a Puerto Rico y Filipinas.Por su parte España intentó evitar hasta el último momento este enfrentamiento.

Hacía apenas unas semanas que España había instalado en la isla un régimen autónomo y solo faltaban unos días para las elecciones al Parlamento Insular intentando frenar el auge de los independentistas, pero esta medida llegó tarde.Los Estados Unidos diseñaron entonces su plan de intervención.El 11 de Abril de 1898 el presidente William Mckinley obtuvo el permiso del Congreso y el presupuesto necesario para desarrollar en Cuba una intervención de gran intensidad.En los primeros días de declarada la guerra, los norteamericanos contaban con un contingente de 125.000 voluntarios que posteriormente se amplió a los 200.000.Para el 21 de abril inician el bloqueo de los principales puertos cubanos sometiéndolos a intensos bombardeos, lo que también ocurrió en San Juan de Puerto Rico y Manila.La invasión terrestre comenzó por el oriente cubano previo pacto con las fuerzas independentistas que apoyaron la maniobra y consolidaron una cabeza de playa.Fecha decisiva en la derrota será el 3 de Julio, con el combate naval que sufre España a manos de Estados Unidos en la bahía de Santiago de Cuba.La escuadra española al mando del almirante Pascual Cervera quedó neutralizada y con ella las esperanzas españolas que tras este episodio quedará convencida de su inferioridad militar y su imposibilidad de mantenerse en la guerra.

Un dato a tener en cuenta es la negativa del ejercito de Estados Unidos a que las tropas mambisas entren en Santiago de Cuba bajo la excusa de evitar enfrentamientos con los españoles, negando por tanto desde un primer momento a los cubanos cualquier grado de iniciativa en las decisiones que se empiezan a tomar en el país.

La guerra apenas duró lo preciso para que las tropas españolas acelerasen su repliegue,de modo que casi de inmediato se iniciaron conversaciones de paz y el 11 de Agosto quedaron suspendidas las hostilidades.El 10 de Diciembre se firmo el "Tratado de París" en virtud del cual España dejó en manos de los Estados Unidos a Cuba y el resto de sus territorios coloniales.Esta capitulación española ante los norteamericanos supuso un fuerte agravio para los independentistas cubanos que habían esperado ese momento durante décadas. Estábamos aún en el año 1898 y Cuba estaba cambiando su diseño como pueblo pero no su estigma de país colonizado.Historicamente esta etapa se conoce como el "primer periodo de ocupación norteamericana".Los Estados Unidos tomaban el control absoluto no solo en lo militar sino que también en lo político.El primer mandatario norteamericano será el General John R.Brooke,este dictará medidas en todos los ordenes de la vida cubana, las primeras de ellas para desactivar las instituciones procedentes de la lucha independentista,a la vez que se gana el favor de los llamados anexionistas que se mostraban partidarios de la tutela de Estados Unidos o sencillamente ven en este nuevo escenario una situación de ventaja económica para sus inversiones.Brooke organiza un Gobierno Civil y dota al país de Instituciones a su medida, favorece el dominio político de los pronorteamericanos y da alas a la penetración económica de las inversiones procedentes de los Estados Unidos creando en la isla una situación prácticamente de monocultivo centrada en el azúcar y el tabaco y por tanto con una gran dependencia importadora.Todo esto ocurre en un país que al termino de la guerra ofrece un censo de 1.572.000 habitantes y que ha sufrido al menos 400.000 fallecidos como consecuencia de la guerra.

Este nuevo escenario no pasará desapercibido para los cubanos que aspiraban a la independencia plena, así, Máximo Gomez, general en Jefe del ejército libertador afirmará en una proclama desde Jagüajay "ni libre ni independiente todavía". Otros grupos de oposición de tendencia obrerista iniciarán tímidos intentos por consolidarse, será el caso del Partido Socialista de Cuba que surge en 1899 con el apoyo de exiliados que regresan a la isla y antiguos jefes del "Mambisado",sin embargo este apenas dura unos meses.Se crea en general una corriente de contestación a la ocupación norteamericana que también tendrá significación en los Estados Unidos donde muchos empresarios tabaqueros ven peligrar su actividad por la dura competencia que suponen las importaciones cubanas.En este contexto el gobierno norteamericano da un giro a su estrategia pasando ahora de un control militar absoluto a un cuidado diseño de control político.En definitiva, se darán los pasos para una situación de independencia tutelada.A finales de 1899 se convocan elecciones municipales y al surgir el nuevo siglo se da el visto bueno al surgimiento de nuevos partidos políticos en Cuba,será el caso del "Partido Nacional Cubano" sustentado por una burguesía nacionalista, el "Partido Radical Cubano" secundado por los grupos más radicales del mambisado o el partido "Unión Democrática" integrado mayoritariamente por autonomistas partidarios de una tutela norteamericana. En julio de 1900 se celebran las elecciones municipales con un sufragio muy restringido,el mismo que en septiembre de ese mismo año elegirá a los 31 miembros de la "Asamblea Constituyente".En estas primeras elecciones ganarán los independentistas de diversas tendencias, que tienen como tarea básica dotar al país de una Constitución.En Febrero de 1901 se aprueba el texto que esencialmente supone una Constitución de espíritu nacionalista que adopta la "República" como forma de gobierno y que en general se ajusta a las conquistas de la ilustración francesa y recoge lo esencial del pensamiento "Martiano".El gran fiasco llegará justo al final de este trámite, cuando los Estados Unidos impongan sus condiciónese estas llegaron en forma de enmienda presentada en el Congreso norteamericano por el congresista Orville Platt,la cual dotada de ocho artículos, implicaba una dependencia absoluta de la nación cubana hacia los Estados Unidos en asuntos fundamentales de la economía, la defensa y las relaciones externas de los cubanos.En concreto suponía el derecho a intervenir militarmente sin previa consulta, obligaba a Cuba a ceder territorios a Estados Unidos para la creación de bases militares o mineras pero a su vez suponía la imposibilidad de que Cuba cediera territorio a terceros países o firmase convenios con estos que menoscabasen la defensa nacional.Como puede observarse,la enmienda Platt fue el instrumento elegido por los Estados Unidos para cesar en su ocupación militar pero manteniendo un control absoluto sobre la isla a la que dejaba margen tan solo para gestionar los asuntos "domésticos".La imposición norteamericana supuso que esta enmienda quedase incorporada a la Constitución cubana como un apéndice de la misma.Tras tensos debates y una evidente fractura en la clase política cubana, la enmienda fue aprobada con un margen de cuatro votos.Técnicamente Cuba iniciaba su andadura como país libre,la realidad era manifiestamente distinta.

El 31 de Diciembre de 1901 serán convocadas las primeras elecciones presidenciales.A pesar de que se presentan dos candidatos,a la postre solo concurrirá Tomás Estrada Palma que es el elegido por la administración norteamericana.Procedente del Partido Revolucionario Cubano de José Martí, siempre actuó como un hombre de enlace con los norteamericanos durante las luchas de independencia.Estrada Palma va a ser el prototipo de Presidente corrupto y plegado a los intereses de los Estados Unidos, no en vano residía en aquel país y regresó a Cuba solo cuatro meses antes de las elecciones .Su campaña fue tremendamente fraudulenta lo que provoco aireadas protestas pero venía a consolidar la situación de privilegio de los sectores económicos ventajistas y ofrecía a los Estados Unidos todo tipo de garantías.Bajo su mandato este país construyó la base naval de Guantánamo.Junto a esto, su etapa se vio marcada por numerosas huelgas e insurrecciones que serían violentamente aplastadas por la recién constituida Guardia Rural y por el propio ejercito, ambos con un marcado carácter represor.Al final de su mandato Estrada Palma apostó por la reelección,lo que dio lugar a que las protestas aumentasen de tono hasta crearse un clima de revuelta que dio lugar a una nueva ocupación militar de los Estados Unidos.

En septiembre de 1906 William Taff,Secretario de Guerra de los Estados Unidos desembarcó en Cuba ocupando ahora el cargo de Gobernador provisional de la isla y llevando a cabo una política de aparente pacificación social que en realidad supondría un estancamiento en las aspiraciones de independencia cubanas ya que su actividad se centró en garantizar los intereses norteamericanos y de la oligarquía dominante .Este proceso culminará en 1909 con la convocatoria de nuevos comicios en los que será elegido el liberal José Miguel Gomez.Se iniciaba una etapa en la que se sucederán los presidentes dóciles con Estados Unidos y con una penetración aún mayor de empresas
norteamericanas que además de copar los sectores agrícolas y mineros acaparan ahora la banca y se convierten en casi los únicos acreedores de la deuda externa cubana a la vez que controlan los servicios públicos y el ferrocarril.Como praxis política se consolidará la practica de la corrupción.Las "botellas" serán la denominación que se de en Cuba al pago de comisiones fraudulentas, las cuales se convierten en una constante en la vida política y administrativa cubana, miles de funcionarios y políticos cubanos reciben sueldos suculentos a cambio de interferir en los manejos gubernamentales o sencillamente para que miren hacia otro lado.
José Miguel Gomez se mantendrá en el poder hasta 1913.Le sucederá Mario García Menocal que estará en el poder dos mandatos.En 1921 será elegido presidente Alfredo Zayas.Entre ellos apenas hay matices en el estilo de gobierno pero la realidad es que las constantes vitales de la República seguirán siendo las mismas:Dependencia política, económica y militar de los Estados Unidos y corrupción general en todos los estamentos de la nación.Un dato significativo en esta etapa serán las consecuencias de la primera guerra mundial que dio lugar a que las exportaciones de azúcar cubanas se disparasen hacia una devastada Europa lo que supuso cierto florecimiento económico, sin embargo con la recuperación de aquellos la situación volvió a deteriorarse.Otra característica del período será la influencia de la "Revolución de Octubre" en Rusia, lo que dio lugar al surgimiento de corrientes de pensamiento y a una actividad obrerista sobre todo socialista y anarcosindicalista.Ninguna de estas alcanzará madurez ya que son combatidas con una represión implacable.Durante el transcurso de estos gobiernos se producirá un cansancio electoral y un descrédito de la clase política que será aprovechado en la convocatoria de elecciones de 1925 por Gerardo Machado, también llamado por muchos el "Mussolini Tropical",un candidato populista que llegará al poder con una considerable base social construida a base de promesas y que basará su mandato entre otras cosas en un ambicioso plan de obras públicas que dinamizará la economía pero que a su vez será un claro servidor de los intereses norteamericanos.Machado se mostrará como un represor incansable con especial obsesión sobre el recién creado Partido Comunista Cubano, no en vano en su mandato encarceló a Julio Antonio Mella fundador del mismo, al que tras desterrar a México, persiguió en este país hasta lograr su asesinato; lo mismo ocurrió con Carlos Baliño que falleció de muerte natural asediado por miembros de la "Seguridad del Estado".En lo referente a obras públicas su mayor logro fue la construcción de la "carretera central" que vertebra la isla de oeste a este y del "Capitolio" cubano, un edificio similar al norteamericano, con lo que reafirmaba aún más su sumisión hacia los Estados Unidos.

En 1927 el Congreso cubano maniobró en el sentido de prorrogar los poderes de Machado hasta 1935,lo que dio lugar a un gran movimiento opositor que tendrá representantes en todo el espectro político de la isla, desde el propio sistema, pasando por las izquierdas y fundamentalmente con la presión del movimiento estudiantil que en este período irrumpe con fuerza.Esta situación interna coincide con la gran crisis mundial de 1929 que tienen especial incidencia en la economía de Estados Unidos los cuales trasladan la misma a Cuba con fuertes subidas arancelarias sobre el azúcar y el tabacos será este por tanto un contexto propicio para una nueva eclosión popular que desemboca en la huelga general del 20 de marzo de 1930,que a diferencia de los movimientos populares anteriores ofrece la cohesión de los grupos que participan en ella e incorpora nuevos sectores.La huelga contó con un apoyo total, con los campesinos, sectores de la burguesía que nunca antes habían estado en estos movimientos y con la variante de la acción armada en las ciudades manifestándose a modo de sabotajes.De esta movilización que durante veinticuatro horas paralizó el país surgió el convencimiento de la capacidad de acción que en adelante tendrían las izquierdas en Cuba.El 30 de Septiembre de 1930 se llevó a cabo una manifestación contra Machado en la que falleció el activista Rafael Trejo que era miembro del llamado "Directorio Estudiantil",un órgano que será duramente reprimido pero que junto a su escisión "Ala Izquierda Estudiantil" se mostrará como el auténtico nervio de las revueltas.Ante esta situación Machado decretó el estado de guerra .En este contexto, surgieron en Cuba formaciones de corte fascista que reivindicaban a Mussolini y que se mostraron como organizaciones muy populistas; es el caso del "ABC".Por su parte desde la izquierda aparecieron otras organizaciones como "Unión Revolucionaria" que bajo el liderazgo de Antonio Guiteras tendrá un marcado carácter antimperialista y liberador. En 1933 se creó en Miami la "Junta Cubana de Oposición" que agrupaba a todos los sectores de oposición al gobierno Machado y que en algunos casos buscó la mediación norteamericana, los cuales nombraron embajador a Benjamín Welles con el encargo de garantizar la estabilidad de las inversiones norteamericanas y buscar los apoyos necesarios de cara a las elecciones que habrían de celebrarase en 1935 conteniendo los intentos de rebelión popular.Aunque se dictó una amnistía política y se aplicaron diversas medidas populistas, estas no lograron frenar el descontento popular que tuvo su máxima expresión en una huelga general y en el asalto al Palacio Presidencial que fue seguido de una gran masacre por parte de las fuerzas del orden.Indiscutiblemente la huelga general habida en Cuba en 1933 supuso una demostración de la madurez de los movimientos de oposición y de su disposición a alcanzar el poder en un tiempo no muy lejano.En una situación de caos generalizado el Presidente Machado presentó su dimisión el 12 de Agosto y huyó del país.Lo que siguió fue una gran agitación obrera y estudiantil con la persecución y en muchos casos ajusticiamiento de elementos del machadato que habían ejercido el poder en los años anteriores, una nueva amnistía, el regreso de los exiliados y fundamentalmente el resquebrajamiento del aparato represivo del Gobierno.A Machado lo sustituyó Carlos Manuel Céspedes que al frente de un gobierno que agrupaba a todas las fuerzas conservadoras del país, apenas duró tres semanas en el poder.La gobernabilidad del país estaba en juego y fue en este escenario donde irrumpió un movimiento atípico; fueron los militares de los escalafones inferiores los que bajo la excusa de una situación gravosa en las condiciones de vida de la tropa y los suboficiales , dieron un golpe de mano haciéndose con el poder.Se trató de la conocida como "Revolución de los Sargentos" entre los que aparecía ya un desconocido hasta el momento Fulgencio Batista que maniobró con gran habilidad en los primeros momentos de esta situación.Estos militares crearon la llamada "Unión Militar Revolucionaria" y Batista ascendió sin escalas intermedias de sargento a coronel, convirtiéndose en el hombre de confianza de la administración de los Estados Unidos y siendo elevado al cargo de Jeje del Estado Mayor del ejercito.El siguiente acto en este proceso fue el nombramiento como presidente de Ramón Grau San Martín el 10 de septiembre de 1933.Grau formó un gobierno de claro carácter nacionalista que aglutinaba a todas las tendencias.Por vez primera desde la independencia de Cuba un líder de la izquierda se encontraba sentada en el banco del gobierno, este será el caso de Antonio Guiteras que promoverá políticas progresistas que chocarán con los intereses de la derecha más rancia.El propio Batista ocupará un lugar principal en el gabinete de Grau, mostrando desde el inicio sus credenciales de hombre al servicio de los Estados Unidos.En cualquier caso este será un período efervescente en el que Cuba es objeto de una serie de reformas sociales nunca antes vistas en el país y que tendrá su punto culminante en la disolución de los partidos radicales de la derecha tradicional.El gobierno Grau será un equipo que entrará en continuas contradicciones dada su composición, lo que dio lugar a enfrentamientos constantes en su seno, además de contar con la oposición frontal de la oligarquía cubana, el partido "ABC",los grupos de derecha del "Directorio Estudiantil",el ejercito liderado ahora por Batista ,y por supuesto de los Estados Unidos.Demasiados intereses en contra que propiciaron que el 15 de enero de 1934 se asistiera a un nuevo golpe de estado encabezado por Batista; el llamado gobierno de los "cien días" había demostrado las capacidades de la izquierda cubana pero también sus debilidades.

Este nuevo levantamiento situó en el poder a Carlos Mendieta,un ultra reaccionario partidario del injerencismo norteamericano que en pocos días suprimirá las conquistas sociales del período anterior.Ante esta situación, quienes habían tenido el poder hasta ese momento se reorganizaron desde la oposición.Grau San Martín creará el "Partido Revolucionario Cubano/Auténtico" de corte antimperialista y Antonio Guiteras fundará Joven Cuba en la que se aglutinan intelectuales, estudiante y en general las clases medias de tendencia izquierdista.A todo esto el Partido Comunista celebraba su segundo congreso mostrándose como una formación que mantenía estrechas relaciones con los movimientos campesinos y promoviendo conjuntamente con la Central Nacional de Obreros de Cuba un clima de contestación social. Y así llegamos al punto en el que en 1934 el presidente norteamericamo Roosevelt firmará un nuevo tratado de reciprocidad con Cuba que terminará por derogar la enmienda Platt,mostrandese ahora menos injerencista aquellos en sus relaciones con Cuba si bien la trama de sus intereses estaba completamente tejida en la isla.En 1935 desde la Universidad se promovió una nueva huelga general a pesar de no contar con el visto bueno de amplios sectores de la izquierda por encontrarse sus organizaciones muy debilitadas tras los últimos movimientos represivos surgidos del gobierno Mendieta,esta se fijó para el mes de Marzo y finalmente supuso un claro fracaso.La represión se acentuaría aún más y el exilio fue la única salida para cientos de cubanos.Los episodios represivos tocaron techo con el asesinato de Antonio Guiteras cuando intentaba huir del país por la playa del Morrillo en Matanzas.
Este será pues el clima político y social que vive cuba al inicio de la guerra civil española, que como veremos más adelante supuso un punto de inflexión en los movimientos de oposición ya que la guerra de España supondrá para muchos la lucha contra el avance del fascismo en el mundo a la vez que se supone un revulsivo para los movimientos de oposición al gobierno cubano.Al inicio de la guerra española los destierros y huidas del país estaban siendo masivos por el imperante estado represivo, sin embargo durante el transcurso de la contienda se producirán movimientos tácticos en el gobierno que cambian radicalmente el panorama.Las elecciones son convocadas para enero de 1936 y desde mayo gobierna en Cuba Miguel Mariano Gomez que esta al frente de una coalición formada por "Acción Republicana el Partido Liberal y Unión Nacionalista",todos ellos grupos políticos coyunturales al nuevo escenario político y quien en realidad mueva los hilos del poder y mantenga línea directa con los Estados Unidos seguirá siendo Fulgencio Batista.A partir de esta nueva etapa de gobierno se mantiene el poder represivo del Estado pero aparecen ciertos síntomas de un giro en la forma de gobierno.Esta se traducirá en medidas proteccionistas al puro estilo mussoliniano como la creación de una "corporación nacional de asistencia pública" que incluía aspectos como la sanidad, la educación y la beneficencia pública.Iguialmente se pone en marcha un plan trienal de obras públicas y se llevan a cabo iniciativas peculiares como la creación de escuelas en zonas rurales apartadas en las que regirá un régimen militarizado y en las que los maestros serán sargentos del ejercito regular.A Miguel Mariano Gomez que fue destituido por la perdida de confianza que hacia el mostraron Batista y otros personajes de la oligarquía cubana lo sustituyó Federico Laredo Brú,el presidente que gobernará Cuba en tanto se desarrolla la guerra en España.Laredo Brú imprimirá un estilo de gobierno ilusionante tendente a la normalización democrática e institucional.En 1938 se produce un gesto político de gran calado,se decreta una amnistía que prepara el camino a un nuevo escenario político.Antes se producirán más novedades como va a ser la autorización de la manifestación pública con motivo del primero de mayo de 1937.Los avances en materia sindical son evidentes pero también se atisba el nuevo estilo del gobierno que apuesta por legalizar organizaciones para manejarlas dentro del sistema.En 1938 se legalizan todos los partidos políticos incluido el Partido Comunista Cubano y a finales de 1939 se dan los pasos para normalizar la situación de las Instituciones cubanas.Se convocan elecciones para la Asamblea Constituyente que se celebran en Noviembre de 1939 y que da como resultado una cámara muy heterogénea en la que están representadas todas las tendencias y de la que sacará partido el grupo de poder de Fulgencio Batista que leerá como nadie este proceso democrático para asegurar su permanencia en puestos clave.La oposición de izquierdas logro cinco diputados, una cifra escasa que demostraba que el lenguaje electoral del sistema no estaba diseñado para ellos.La Asamblea Constituyente elaboró una nueva Constitución para Cuba que se aprobó en 1940.
Por tanto vemos como en lo referente a la guerra española y a la participación de voluntarios cubanos, la situación fue muy distinta en la partida de los mismos que al retorno de estos, cuando las organizaciones de izquierdas se encontraban legalizadas y reclamando su retorno de los campos de concentración franceses.




LAS IZQUIERDAS EN CUBA/GENESIS DE UNA REVOLUCION


Los apoyos recibidos por la república española desde Cuba durante la guerra civil procedieron casi exclusivamente de las organizaciones de izquierda, grupos estos que estaban ganando espacio político en la isla a pesar de las dificultades propias de gobiernos dominados por la oligarquía local y bajo el control de los Estados Unidos.Estas organizaciones y fundamentalmente el Partido Comunista Cubano tendrán en el proceso español una actividad que acelerará su
madurez de cara a los retos que estaban por llegar y que a la postre supondrían el modelo "revolucionario" como forma de de organización del Estado cubano.

El proceso de las izquierdas cubanas esta marcado por el hecho mismo de la independencia cuyo lider natural José Martí, elaborará un ideario que será reivindicado por los distintos grupos progresistas que en adelante surjan en Cuba. Las bases del pensamiento "Martiano" parten de un credo democrático e igualitario entre los ciudadanos y su peculiaridad estriba en su marcado carácter antiimperialista y panamericanista.Martí murió en combate antes de lograrse la independencia del país pero su pensamiento trascendió durante generaciones y hasta la actualidad.El partido por el creado, el "Partido Revolucionario Cubano" no logro superar la primera criba de la administración norteamericana que lo disolvió bajo el pretexto de haber alcanzado este sus objetivos.Sin embargo, un cofundador del partido, Carlos Baliño, tendrá un papel esencial en el surgimiento de nuevas organizaciones de corte revolucionario.A Baliño se le atribuye la función de enlace entre aquellos primeros revolucionarios cubanos que lucharon por la independencia y los comunistas que habrían de organizarse como partido a partir de 1925,no en vano, fue miembro fundador del "Partido Revolucionario Cubano" y el "Partido Socialista Popular" que fue la primera denominación que en Cuba recibió el Partido Comunista.
La independencia cubana coincidirá en el tiempo con la gestación de idearios revolucionarios en el mundo, recibiendo influjos de las teorías marxistas que llegan desde Rusia, desde México con su reafirmación nacionalista y por supuesto desde España de la que recibe dos claras corrientes de pensamiento progresista; de una parte el socialismo con Pablo Iglesias como referente y de otra el anarcosindicalismo que será ampliamente difundido en Cuba en los primeros años del siglo XX.Tres serán las manifestaciones externas de las izquierdas cubanas en estos años de definición ideológica:organizaciones obreras, partidos políticos y organizaciones estudiantiles y de intelectuales serán el motor de la revolución en marcha.

Respecto de las organizaciones obreras en estas se distinguen dos vertientes; las agrarias, con predominio de los trabajadores azucareros y tabaqueros y las organizaciones industriales y propias del sector de los servicios públicos.En ambos casos mostrarán su beligerancia desde incluso antes de la independencia cubana si bien es a partir de esta cuando se muestren más combativas, beneficiándose del regreso de miles de exiliados en muchos casos influenciados por organizaciones obreras de los países de procedencia.Se crearon organizaciones gremiales, círculos obreros ,organizaciones de oficios etc.Surgió la Liga General de Trabajadores Cubanos cuyo órgano de prensa "Alerta" se convirtió en una plataforma de protesta no solo en lo laboral sino también de los grandes asuntos de la nación.La primera huelga masiva de que es objeto la nueva nación cubana data de noviembre de 1902.En este caso se trató de una protesta del sector tabaquero que se denominó "huelga de los aprendices" y en la que tuvieron especial protagonismo los trabajadores negros que eran particularmente discriminados,antes,ya en 1899 el país vivió una importante huelga del sector de la construcción.Durante la primera década del siglo XX el movimiento obrero cubano asistirá a un proceso de organización interna que estará dominado por la corriente anarcosindicalista y en general se mantendrá alejada de otras reivindicaciones que no sean las propias del trabajo y de las condiciones de vida de los obreros.Un hito en su trayectoria lo encontramos en 1914 con la creación de la "Asociación Cubana para la Protección del Trabajo" que nacerá por el impulso de círculos cercanos al presidente García Menocal que pretendió garantizarse el apoyos de estos grupos pero que cometió el error de permitir la elección libre de delegados en su congreso constituyente, conformado por 1.400 delegados de todo el país y que dio un giro a las reivindicaciones obreras ya que a pesar de que la mayoría de sus propuestas no llegaron a materializarse constituyó una demostración de poder.Se dio la circunstancia de que fue en este evento donde por vez primera y en un acto legal se hizo mención a Carlos Marx,por el que algunos de los participantes mostraron sus simpatías.En esta etapa se crearon en Cuba cientos de sindicatos y organizaciones de trabajadores, ampliando su ámbito a sectores profesionales hasta el momento desorganizados.

Por su parte desde el sector agrícola, mayoritario en el país, las organizaciones gremiales venían funcionado con escasa intensidad desde principios del siglo y sus reivindicaciones se planteaban a modo de revueltas, generalmente duramente reprimidas.El reflejo de la "Revolución de Octubre" en Rusia dará lugar a cierta dinamización de sus peticiones.

En 1921 se creó la Federación Obrera de la Habana y en 1924 la Hermandad Ferroviaria de Cuba.Ambas impulsarán la actuación del movimiento obrero y se mostrarán como organizaciones con capacidad para desestabilizar al gobierno cubano constituyéndose en la base de la primera central sindical cubana que surgirá en 1925 en un congreso en Camagüey con la presencia de 128 organizaciones de todo el país.Nace la "Central Nacional Obrera de Cuba" que además de mostrarse como un instrumento sólido en la defensa de los trabajadores se ofrece como una organización dispuesta a entrar en la lucha por las reivindicaciones políticas de los cubanos.

Una vez tejida la red del movimiento sindical cubano estos enfrentarán grandes retos. Tras la crisis derivada del crak financiero de 1929, Cuba afrontó igualmente una situación sin precedentes con una reducción en las exportaciones de azúcar y tabaco de hasta el 50%, el cierre de industrias y un descenso general en los salarios. El desempleo en la isla alcanzó en 1933 la cifra de un millón de parados.Todo ello dio lugar a que un movimiento obrero cada vez más organizado incrementase sus acciones de lucha no solo en lo laboral sino que también en lo político. La Confederación Nacional Obrera de Cuba actuaba bajo las directrices del Partido Comunista que en aquellos años decisivos contó con el liderazgo del abogado Rubén Martinez Villena que marcó el ritmo de las reivindicaciones. En 1930 y ante la intensidad de las acciones de las organizaciones obreras el Gobierno de Gerardo Machado ilegalizó a la CNOC y la Federación Obrera de la Habana .Pese a ello estos grupos mostraron su madurez organizativa y provocaron una continua presión al Gobierno hasta la caída de Gerardo Machado, donde la CNOC actuó como elemento clave de la protesta paralizando el país .Tras el derrocamiento de Machado las organizaciones obreras con el PCC como referente tomaran hasta 36 centrales azucareras estableciendo soviets en muchas de ellas,lo que da una imagen de la dimensión de las acciones que se estaban produciendo en Cuba.
Con el estallido de la guerra civil española el movimiento obrero cubano tomará un gran protagonismo en defensa de la república española actuando como vivero de combatientes que integrarán los distintos grupos que salgan hacia España e igualmente desarrollará una importante labor en el Comité de Ayuda a la República Española en lo referente a ayuda social y de envio de ayuda material.A pesar de que son los intelectuales y los cuadros políticos quienes más trasciendan en la actuación de los "Voluntarios de la Libertad cubanos" cuantitativamente serán los miembros del movimiento obrero quienes más presencia tengan en estos contingentes aunque se debe considerar que en estos tiempos la "sinergia" entre sindicato y partido era una hecho evidente.

Pero si los obreros conformaron la fuerza de choque de esta etapa, fueron las organizaciones políticas y en particular el Partido Comunista Cubano quien dotase de ideología y discurso a los obreros en estos tiempos de cambio.Como ya se ha dicho, será el antiimperialismo el norte ideológico de los distintos grupos que surgen en Cuba asumiendo posiciones de izquierda, por lo que el proceso político de México y otros movimientos aislados en la región tendrán una clara influencia en la gestación de estos grupos.En cualquier caso sería la "Revolución Rusa" la que marque el ritmo en la aparición de grupos organizados.El liderazgo en los momentos iniciales recaerá en elementos procedentes del proceso independentista y la figura de Carlos Baliño el máximo exponente de dos generaciones políticas que convergen en un proceso rupturista con la política tradicional.Baliño fue junto a José Martí cofundador del Partido Revolucionario Cubano y tras la desaparición de este ,promovió el surgimiento de otros grupos que giraban en torno a los postulados de la Internacional Socialista. 1922 será un año clave en este proceso, en ese momento la "Agrupación Socialista de La Habana" asumió las tesis de la "III Internacional Socialista" y al año siguiente cambió su denominación por la de "Agrupación Comunista de la Habana",siendo imitada por diversas organizaciones locales del resto del País.Además de Baliño es definitiva la irrupción en la escena política de un joven estudiante "Julio Antonio Mella" y junto a este José Miguel Pérez, de origen español y con un gran prestigio en los círculos progresistas de la isla.Juntos darán el impulso definitivo para la creación del Partido Comunista Cubano.Entre los días 16 y 17 de agosto de 1925 se reunieron en la calle Calzada del barrio habanero de "El Vedado" ,un pequeño grupo de delegados de distintas agrupaciones que ya se autodenominaban como comunistas.Eran en torno a veinte miembros que representaban aproximadamente a un centenar de comunistas de todo el país que adoptaron un programa marxista-leninista y que eligieron como primer secretario general a José Miguel Perez.Todo el proceso contó con la supervisión del Partido Comunista de México que garantizó el respeto a las propuestas de la III Internacional.Habia nacido el PCC que inicialmente se proponía ampliar su nivel de presencia social al mundo obrero y al estudiantil.Su surgimiento coincidió con la llegada al poder de Gerardo Machado que desplegó una represión sin límites contra este grupo hasta el punto de encarcelar a Mella y expulsar del país a José Miguel Pérez, sin embargo la iniciativa tuvo continuidad por la acción de un grupo de intelectuales y
lideres obreros que soportaban los más duros años del movimiento Comunista Cubano.El Abogado Rubén Martinez Villena, el escritor Juan Marinello,Fabio Grobart,exiliado procedente de las luchas contra el fascismo en Europa y otros muchos, lograron que el PCC calase en la sociedad cubana.El asedio de líderes comunistas tuvo su punto culminante en la detención de Julio Antonio Mella que fue encarcelado y tras una huelga de hambre de 19 días que termino por una gran movilización popular, se exilio en México para organizar la acción armada contra Machado pero fue asesinado.La llegada de sus cenizas a Cuba fue una nueva prueba de fuerza del movimiento comunista.En general las características del PCC eran básicamente afines a las de las otras organizaciones de la III Internacional Socialista.El liderazgo de Rubén Martinez Villena que no orgánico pero si real,propició que el partido volcase su estrategia en la movilización obrera y la agitación estudiantil con excelentes resultados que tuvieron su punto culminante en Marzo de 1933 con la huelga general y el derrocamiento de Machado.Tras la muerte por enfermedad de Rubén Martinez Villena el movimiento izquierdista cubano perdió a su líder natural pero tanto las organizaciones sindicales como las políticas mostrarían su mayoría de edad asumiendo los nuevos retos.Blas Roca asumirá por este tiempo la Secretaría General del partido.Al estallar la guerra española el PCC era ilegal, pequeño en cuanto a número de afiliados y aún con una limitada capacidad de acción, sin embargo su aportación para luchar contra el fascismo en España fue una prueba de que se estaba consolidado como una alternativa real que había logrado instalarse en el movimiento obrero y estudiantil, sus dos mejores armas para abordar la revolución pendiente y será en esta etapa de huelgas y movilizaciones cuando los comunistas adquieran un gran prestigio ampliando su base social con numerosos obreros procedentes del anarcosindicalismo con especial incidencia en los centrales azucareros.En definitiva el PCC rompió su aislamiento a través de la CNTC y de la labor de había mantenido en la última década Rubén Martinez Villena en el ámbito de los intelectuales y en el mundillo estudiantil en general.

Junto al PCC coexistían otras organizaciones de izquierdas pero en general su presencia será menor en relación a la capacidad de respuesta de PCC solo con la excepción de el trabajo desplegado por Antonio Guiteras, líder progresista que asumía postulados de izquierdas y la mayor parte de las posiciones socialistas pero distanciado del PCC.Guiteras creará organizaciones que cambian de nombre pero que mantienen el mismo ideario y base social,TNT,Unión Revolucionaria y Joven Cuba funcionan bajo su liderazgo hasta su muerte.Otras organizaciones políticas que ejercen la oposición al Gobierno serán el Partido Revolucionario Cubano "Auténtico" que contará con una importante base humana pero se mostrará como una organización dubitativa en los momentos clave del proceso revolucionario cubano, ofreciéndose años más tarde como una alternativa de poder una vez que habían adoptado un programa político que no alteraba en lo esencial al de los gobiernos de la política tradicional cubana.Otras organizaciones importantes en la izquierda cubana de la época serán el Partido Agrario Nacional, la Organización Cubana Antiimperialista los "Auténticos",sector desgajado del
Partido Revolucionario Cubano y que estará liderada por Carlos Prio Socarrás y la "Unión Revolucionaria" que responde a la nueva estrategia de los comunistas cubanos por contar con organizaciones satélite que se inscriban dentro de la legalidad.
Las izquierdas en Cuba protagonizaron por vez primera la acción de gobierno en el gabinete surgido tras el derrocamiento de Machado, donde Antonio Guiteras logró la Secretaría de Estado de Gobernación, responsabilidad clave en el control del ejercito y las fuerzas de seguridad.Se trató de una experiencia breve ya que apenas duró cien días y además contó en todo momento con las dificultades propias de un gobierno en el que coexistían fuerzas reacccionarias e izquierdistas, sin embargo esta etapa permitió vislumbrar la capacidad de los últimos para acometer una profunda renovación en las estructuras de la sociedad cubana.La labor de Antonio Guiteras que con frecuencia fue incomprendido fue netamente revolucionaria como lo demuestran las medidas sociales adoptadas y su pretensión de dotar a la sociedad cubana de una serie de libertades y derechos hasta entonces desconocidos.Para desgracia de las izquierdas esta situación fue tan efímera como convulsa, ya que Fulgencio Batista que ejercía como Jefe de Estado Mayor del Ejercito, protagonizó una serie de incidentes violentos que cortocircuitaron las nuevas medidas del gobierno.Por su parte el presidente del país,Ramón Grau San Martín, de tendencia "Nacional Reformista" se mostró en todo momento incapaz de liderar un gobierno con el que no se identificaba ideológicamente.

Tras la experiencia del gobierno surgido con la caída de Machado, las izquierdas se vieron sometidas a una terrible represión.El 15 de enero de 1934 Batista protagonizaría un nuevo "Golpe de Estado" que en este caso dará lugar a un gobierno de concentración nacional bajo la presidencia de Carlos Mendieta.Los partidos de izquierdas pasaran a la clandestinidad y se producirán reajustes en el modelo de oposición.La formación política liderada por Antonio Guiteras TNT,dará lugar al nacimiento de "Joven Cuba" que se mostrará particularmente activa y junto a estos se producirá un relanzamiento del movimiento estudiantil con la aparición del "Ala Izquierda Revolucionaria".Precisamente serán estos los que en 1935 promuevan una convocatoria de huelga general que será cuestionada por el PCC y por los partidarios de Guiteras dadas las dificultades que esta entrañaba en un contexto de represión total que había debilitado sobremanera la capacidad de acción de las organizaciones opositoras.A pesar de que finalmente todos los grupos de oposición apoyaron esta huelga,la misma fue un profundo fracaso y dejó a las izquierdas muy debilitadas ya que se produjeron gran cantidad de arrestos y deportaciones por no mencionar las ejecuciones cuyo máximo exponente fue el propio Antonio Guiteras.El movimientos estudiantil forma parte del alma de la Revolución Cubana y comienza a gestarse desde los primeros años veinte con Julio Antonio Mella como líder indiscutible pero con otros protagonistas que serán definitivos para la historia de Cuba como el propio Antonio Guiteras, Juan Marinello,Rubén Martinez Villena, todos ellos ideólogos de un nuevo país en construcción menos importante será la labor del mundo estudiantil en lo referente a agitación y propaganda política, con nombres definitivos en el proceso revolucionario tales como Pedro Vizcaino,Moisés Raigorodski,María Luisa Lafita,Rodolfo de Armas.Todos ellos combatirían en España tras haber impulsado la revuelta estudiantil en Cuba.La Universidad contó con una organización de referencia,el Directorio Estudiantil, sin embargo pronto se observará que tras la caída de Machado cuyos exceso habían unido a diversas tendencias, el movimiento estudiantil de desgaja en dos grupos, derechas e izquierdas.Estos últimos crearán el "Ala Izquierda Estudiantil",una organización con mucho nervio y gran capacidad de sacrificio pero como se verá en la huelga de general de 1935,falto de madurez organizativa.

En este contexto se convocaron nuevas elecciones en diciembre de 1935 que recondujeron al país hacia el sendero de los gobiernos formados por coaliciones de partidos tradicionales.El presidente surgido de estas elecciones fue Miguel Mariano Gomez que tomó posesión en mayo de 1936 pero fue destituido en diciembre por Federico Laredo Bru quien contará con márgenes para generar una expectativa democrática en Cuba,legalizando partidos y sindicatos y en general normalizando el ritmo Constitucional de Cuba.En todos los casos la figura de Fulgencio Batista flotaba por encima de estos con el apoyo explicito de los Estados Unidos.Este por tanto será el contexto de las izquierdas cubanas al inicio de la guerra civil en España.La lucha de los grupos opositores por la restitución democrática en Cuba se identificará desde entonces con la lucha contra el fascismo que el Gobierno legítimo de la República Española libraba contra los militares alzados que contaban con el apoyo de los fascismos europeos.La organización de la ayuda material a España y el surgimiento de grupos de voluntarios para combatir en suelo español fueron en esta etapa el motor de las movilizaciones protagonizadas por los partidos y organizaciones de oposición en un contexto de represión y clandestinidad que hicieron muy dificultosa su tarea.

Cuando faltaba aún un año para que la guerra civil española concluyese, se produjo un cambio de estrategia en las esferas del poder cubano que propiciaron una amplia amnistía en mayo de 1938.Se legalizaron todos los partidos incluido el comunista de cara a las elecciones que habrían de convocarse en breve con la pretensión de "normalizar" la situación política en Cuba.En realidad se tratará de una apertura tutelada desde el poder, sin embargo los combatientes cubanos que salieron del país de forma clandestina retornaron ahora en una situación diametralmente distinta.Muchos de los combatientes que retornaban asumieron el liderazgo de estos movimientos y trasladaron sus experiencias en combate a Cuba con la intención de crear una auténtica oposición armada. Definitivamente las organizaciones de izquierda cubanas vivieron la guerra española como algo propio.





ESPAÑA EN CUBA DURANTE LA GUERRA CIVIL


Como ya se ha dicho con anterioridad, la colonia española en Cuba no solo era importante por su número sino que también por los lazos culturales, comerciales y familiares que unían a españoles y cubanos.Con anterioridad a la proclamación de la Segunda República en España la actividad social de los españoles en la isla giraba en torno a las casas regionales que a su vez desplegaban una gran actividad en lo referente a organizaciones de carácter lúdico o beneficente.Estos centros estaban plenamente consolidados en Cuba incluso antes de la llegada de la independencia del país caribeño, siendo sin duda el "Centro Gallego" el más numeroso e influyente si bien catalanes, vascos y asturianos gozaban de notable influencia en la vida pública cubana.Con el inicio de la guerra, se produjo una polarización de los españoles residentes en cuba y estos centros se vieron seriamente afectados por esta circunstancia y por las limitaciones legales que las autoridades cubanas impusieron a los grupos que desarrollaban actividad política en apoyo de los bandos enfrentados en España.Aunque la naturaleza de estos centros era apolítica, la guerra propició no pocos enfrentamientos entre sus miembros.En adelante,los españoles de Cuba se nuclearon en torno a organizaciones locales que apoyaban a uno u otro bando.

En lo referente a las simpatías por los bandos enfrentados, la inmensa mayoría se mostró partidaria del Gobierno constitucional español mostrando unos apoyos en torno al 95%,sin embargo, quienes apoyaron al bando franquista a pesar de ser muy escasos gozaron de una considerable influencia ya que se trataba de familias y entidades de gran capacidad económica y por tanto muy influyentes en la política cubana y en los medios de comunicación locales.Para explicar esta circunstancia hemos de valorar el paralelismo en los procesos políticos que viven tanto Cuba como España.Desde 1925 y hasta la caída de Gerardo Machado en 1933,Cuba vivió una intensa movilización popular que gozó de un punto de euforia con la caída del dictador y la proclamación del gobierno progresista de Grau San Martín.En el caso de España se vivió una situación similar durante la dictadura de Primo de Rivera y hasta la proclamación de la segunda república en 1931.Esta circunstancia propició que al inicio de la guerra civil, miles de españoles residentes en Cuba se sintiesen más identificados con el gobierno legítimo de España que con los militares sublevados.
Surgieron en Cuba organizaciones de apoyo a la España republicana y en menor medida a los partidarios de Franco.Respecto de los primeros, se creó el "Frente Democrático Español",organismo de carácter político en torno al cual se aglutinaron las diversas tendencia políticas de apoyo a los republicanos españoles y junto a esta,la "Casa de la Cultura y Asistencia Social",cuya actividad se centraba en la propaganda y la ayuda material con destino a España.El "Círculo Republicano Español" y el "Círculo Socialista Español" fueron también organizaciones de españoles en Cuba que se mantuvieron activas durante toda la contienda pero siempre con la limitación de no poder aparecer públicamente como organizaciones de carácter político ya que a principios de 1937 el gobierno cubano dictó un decreto que prohibía estas actividades si bien su aplicación se produjo de forma desigual .Además de a la colonia española, estas entidades atrajeron a partidos políticos y organizaciones sindicales cubanas como el Partido Revolucionario Cubano(Auténtico),el Partido Comunista, el Partido Agrario,Unión Revolucionaria,el partido "Ortodoxo" y otras organizaciones menores y por supuesto las organizaciones de trabajadores,particularmente en el interior del país donde recibieron un fuerte apoyo de tabaqueros y azucareros.
En cuanto a las organizaciones pro franquistas, ellos mismos reconocían no representar más del 3% de la colonia española.Estos crearon el "Comité Nacionalista Español" aunque como veremos más adelante este quedaría minimizado con la llegada de la Falange.Los partidarios del bando franquista centraron su actividad en una labor asistencial que pretendía la captación de trabajadores españoles para su causa.Se trataba de ayudas básicas en momentos difíciles mediante las cuales penetraban en estos grupos divulgando una ideología fascista.
Como se ha visto en un capítulo anterior, en Cuba se creó una plataforma muy sólida de ayuda la república española,la "Asociación Nacional de Ayuda al Pueblo Español" y fue en esta entidad creada por las organizaciones cubanas en la que pusieron su esfuerzo los españoles partidarios de la república,aceptando desde el inicio del conflicto que la eficacia de esta plataforma de trabajo era incontestable con el envío de cuantiosa ayuda material y el reclutamiento de voluntarios como meta.Los republicanos españoles en Cuba,a diferencia de lo ocurrido en suelo español donde los partidarios de la legalidad republicana mantuvieron disputas durante todo el conflicto, constituyeron un bloque sólido que apenas se resintió con la ilegalización de los partidos y organizaciones políticas de españoles en Cuba ya que se presentaban bajo siglas de organizaciones solidarias tras las cuales se desarrollaba una importante actividad política.Hay que significar que los partidos políticos de la izquierda española no gozaban en Cuba de más organización que las que les brindaban sus homólogos locales y que estos no se hicieron notar en la vida pública hasta la llegada de la guerra.El "Circulo Republicano Español" y el "Círculo Socialista Español" eran organizaciones que en los años previos a la guerra mantenían una actividad discreta y tenían escasa implantación y con el inicio del conflicto aceptaron de buena gana la capacidad de acción de las organizaciones cubanas.Llama la atención la no presencia de españoles en los órganos de dirección de las principales asociaciones que se crearon para ayudar a la España republicana.Los españoles partidarios de la república vivieron la guerra civil con la angustia de no gozar de autoridades diplomáticas plenamente legitimadas, con una información muy parcializada por los medios locales y con grandes dificultades para recibir o enviar correspondencia a sus familiares en una España dividida.Ni que decir tiene que este aislamiento,extensible al otros países como México con una amplia colonia española fue aún más angustiosos ante las grandes dificultades para desplazarse a España con la interrupción de las líneas marítimas que funcionaban hasta el inicio de la guerra.

Un caso bien distinto al de los partidarios de la república fue la irrupción en la escena cubana de la Falange Española a través de una división internacional a la cual denominaron "Falange Exterior".Esta organización que a la postre se convertiría en partido único de la vida política española y cuyo líder José Antonio Primo de Rivera había sido ajusticiado por los republicanos en la cárcel de Alicante convirtiéndose en mártir de los sublevados, había surgido apenas unos años antes y no gozaba de ninguna implantación fuera de España y mucho menos en Cuba,sin embargo el inicio de la guerra propició que sus responsables optasen por la creación de bases fuera de España para recabar apoyos y llegado el caso para constituirse en grupo de acción de las milicias nacifascistas,cuya ideología habían asumido.
La aparición de Falange Española en Cuba se produjo justo antes de iniciarse la guerra de España y pasó por constantes vicisitudes tanto en su relación con las autoridades cubanas como con los simpatizantes de los alzados en España que desde el "Comité Nacionalista Español" mantuvieron tensas relaciones con este grupo.Desde España, Falange Española se consolidaba como el brazo político de la "Nueva España" y en ese sentido desarrollo una vocación "imperialista" que necesariamente pasaba por reivindicar la "hispanidad" de América en base al pasado de grandeza de España en este continente.Este discurso asumido por el falangismo había surgido en grupos de intelectuales de la derecha más nostálgica, que desde los años veinte alentaban el liderazgo de España en América como "guía espiritual y política",fue una de los principales obstáculos que encontró Falange en su implantación americana.La creación desde la dirección de Falange de una división exterior fue una medida alentada incluso por los militaressublevados,principalmente por el cuñado de Franco,Serrano Suñer,un entusiasta del sueño imperialista.Se trataba de emular el modelo de los fascismos europeos, caso de "Fase Italiani" creada por el fascismo italiano y de "Ausland Organisation",puesta en marcha por el partido Nazi desde Alemania; estas organizaciones,a diferencia de Falange se ocuparon desde su creación de la puesta en marcha de redes de información y propaganda de una forma discreta pero muy eficaz. Falange sin embargo tendría un duro lastre para su implantación en latinoamerica, no tanto por su ideología totalitaria como por sus aspiraciones de una "España Grande" que hacía recordar tiempos pasados.
Las primeras noticias de la presencia de Falange Española en Cuba se sitúan en junio de 1936.Para ese momento en el que aún no se ha iniciado la guerra en España, José Antonio Primo de Rivera ya está preso y Falange es objeto de tensiones internas por el control del poder, sin embargo, dos conocidos activistas de la derecha española, Antonio Avendaño y Alfonso Serrano
recibirán el encargo de poner en marcha una base falangista en Cuba.Una vez iniciado el conflicto y como se ha dicho anteriormente,Falange tratará de acaparar el protagonismo de los simpatizantes nacionalistas españoles en Cuba lo que desembocó en abiertos enfrentamientos con algunos de los mentores del "Comité Nacionalista Español" provocando una escisión del mismo de modo que el sector más radical del "Comité" se integró en Falange, propiciando desde entonces un clima enrarecido entre ambas organizaciones que se prolongaría incluso después de finalizada la guerra. Sin embargo con el paso de los meses pudo observarse como el proyecto de penetración americana diseñado por Falange Española arrojaba resultados nefastos, con una implantación muy escasa o nula en los países considerados estratégicos en el área del Caribe como México o Venezuela.Desde España, el principal mentor de la Falange,Serrano Suñer no facilitó las cosas ya que siendo un entusiasta de estas operaciones de implantación americana, insistía una y otra vez a los responsables falangistas en que se mantuviese el discurso del papel de España como "guía de las naciones de América".De todos los intentos de implantación en América, era el desplegado en Cuba el único que parecía tener posibilidades de exito.En ese sentido, desde la dirección de Falange Exterior en España se decidió apostar fuerte en Cuba enviando en febrero de 1937 a Gregorio Prendes,un falangista de Oviedo que encontró la hostilidad de los pesos pesados de la organización local,fundamentalmente del Delegado local Del Castaño, siendo sustituido en breve por Alejandro Villanueva que venía desempeñando su labor en la Delegación de Prensa y Propaganda en Burgos.Villanueva que recibió el encargo de consolidar la organización, centró su labor en apaciguar las relaciones internas de la Falange cubana, atraer a los grupos nacionalistas de la isla y normalizar la relación con las autoridades cubanas.Sin duda,se inició una etapa de crecimiento que posibilitó que a inicios de 1938 la Falange cubana contase con 3.000 afiliados de los cuales 150 se constituyeron en grupo de acción aunque sin llegar a mantener más actividad que la vigilancia de sus sedes y escolta de sus líderes.En el plano de la propagada, su órgano de difusión "Arriba España" alcanzó una tirada de 5.000 ejemplares y mantuvo excelentes relaciones con Pepín Rivero,magnate de la prensa cubana de ideología ultraconservadora,cuyos periódicos "Diario de la Marina","Avance" y "Alerta" se mostraron inicialmente partidarios del bando franquista y ofrecía una visión positiva de la labor de la Falange en Cuba.La asistencia social a los emigrantes españoles en Cuba fue la vía de penetración que encontró Falange para ganar adeptos en la isla.En este sentido, Alejandro Villanueva centró su trabajo en reconvertir a las distintas organizaciones locales de "Auxilio Social" en una única y poderosa organización como era la "Hermandad Exterior Española",un proyecto que no logró culminar si bien mejoró considerablemente la coordinación de los grupos locales y su labor propagandística.Es admitido que esta labor posibilitó ayudas a muchos españoles que en aquellos momentos de incertidumbre padecían muchas dificultades de subsistencia aunque siempre bajo el modelo falangista que incluía una notable carga adoctrinadora.
Respecto de las aportaciones de los falangistas para el desarrollo de la guerra en España, una inciativa,el llamado "Plato Unico" practicada por cierto por los partidarios de ambos bandos, fue la que tuvo mayor protagonismo social.Se trataba de recaudar dinero en actos en los que se distribuía un único plato a cambio de aportaciones que generalmente llegaban de la clase dominante cubana.El resultado de esta iniciativa tuvo más éxito en lo propagandístico que en su poder de convocatoria y recaudación como podemos observar en el "plato único" convocado en mayo de 1938 en La Habana,
previsto para 5.000 personas y que sin embargo no logró comprometer la asistencia a más de 270.Sin embargo en otras ocasiones, estos eventos si gozaron de gran acogida y permitieron que el dinero recaudado sirviera para enviar provisiones a los combatientes franquistas en España aunque oficialmente estas cuestaciones estaban destinadas al "Auxilio Social" ya que el decreto de 1937 prohibía expresamente las colectas con fines de guerra.Está constatado que en agosto de 1938 Falange posibilitó el envío desde el puerto de La Habana de 80.000 puros,140.000 cajetillas de cigarrillos y 5.000 kilos de picadura de tabaco con destino a los combatientes franquistas.
Falange logró tejer una red de centros por toda Cuba hasta alcanzar la cifra de 32 oficinas que a su vez canalizaban las ayudas del "Auxilio Social",funcionan como centros de distribución de alimentos y medicinas, mantenían abiertas bolsas de trabajo y actuaron como lugares de intercambio de correspondencia con la España franquista.En general se mostraron eficaces en el desarrollo de su labor social.Esta línea les posibilitó un crecimiento en afiliados que ascendió a 23.000 a la finalización de la guerra, sin embargo,Falange seguiría siendo una organización minoritaria en relación a la actividad de los partidarios del gobierno constitucional español.Junto a esto,habría que citar las malas relaciones que la organización falangista mantuvo con los representantes del gobierno de Burgos en Cuba y en particular con Miguel Espelius,primer representante oficioso del nuevo gobierno.Temerosos estos de la reacción del gobierno cubano que los toleraba pero no los reconocía ,marcaron distancias con los falangistas siempre que les fue posible.Aunque las relaciones mejoraron con el sucesor de Espeliús,Miguel Espinós,Falange siempre constituyó un elemento de tensión para la normalización de relaciones entre Cuba y la España que a la postre resultaría vencedora.
La relación con los partidarios del "Comité Nacionalista" ,a pesar de apaciguarse en los primeros momentos terminó siendo un problema para la expansión falangista.A pesar de las buenas relaciones entre Alejandro Villanueva y el presidente de este comité,Elicio Argüelles, muchos miembros de esta organización se sintieron ensombrecidos por la maquinaria falangista y provocaron aireadas disputas.Sin embargo, todas estas circunstancias quedarían minimizadas frente a la hostilidad de los Estados Unidos que consideraba imprescindible inmovilizar a la Falange cubana a la que consideraba aspirante a facilitar la expansión de los nací fascismos en América, sobre todo al final de la guerra civil que ya dejaba vislumbrar la irrupción de estos en Europa con el inicio de la guerra mundial.Alejandro Villanueva fue relevado en su cargo en el último año de la guerra, considerándose un ascenso esta decisión ya que se le nombró inspector general para América, un premio a su labor en Cuba.Su sucesor,Manuel Gil,un falangista que había sido alcalde de Salamanca por unos meses encontró una Falange bien estructurada pero con grandes retos.Al poco de su nombramiento comenzaron las tensiones con el gobierno cubano que presionado por Estados Unidos comenzó a hostigar a Falange, esto supuso un cambio de rumbo de la política cubana respecto de España en la que a pesar de su supuesta neutralidad había tolerado a los representantes del bando rebelde en Cuba y negociado la normalización de las relaciones comerciales con la España franquista.Desde principios de 1938 los representantes del gobierno de Burgos no volvieron a ser recibidos por las autoridades cubanas, lo que ponía en una débil posición a Falange que era igualmente tolerada pero que contaba con soporte legal muy precario en su aventura cubana disfrazado de organización con fines sociales, una pantalla que funcionó solo por la tolerancia del gobierno cubano y su doble juego de "neutralidad activa".En una visita a Mexico,Batista,hombre fuerte del gobierno cubano que presidía Laredo Bru,decidió alinearse junto a México y proclamar su apoyo al gobierno legítimo de España.Cuba jugaba la baza de contentar las exigencias del gobierno de Estados Unidos y lo hacía bajo el pretextos de las aspiraciones coloniales de la España franquista y al peligro de "quintacolumnismo" de los fascismos europeos que los norteamericanos veían en los miembros de falange.Muy pronto, los periódicos cubanos que se habían mostrado partidarios del bando franquista cambiaron de discurso reivindicando el nacionalismo cubano frente a quienes querían rememorar la España monarquica.En España, los diplomáticos cubanos recibían instrucciones en el sentido de atender la situación de los prisioneros cubanos del bando franquista y en general se creaba un clima de hostilidad hacia los partidarios de Franco en Cuba.
Falange Española en Cuba bajo en su intensidad de acción en los últimos meses de la guerra española, temerosa de la ilegalización.Las proclamas llegadas desde Estados Unidos y difundidas en la prensa y radio cubanas hablaban constantemente de la amenaza de "quintacolumnismo" de los falangistas cubanos.Apenas finalizada la guerra, una investigación llevada a cabo por el Ministerio del Interior cubano propició las primeras detenciones.Estas se producían el 16 de Abril de 1939.Lo que siguió fue un lento proceso de descomposición de la organización falangista que se veían acosados por el gobierno cubano, por el exilio español y por la acción propagandística de los agentes de Estados Unidos que acusaba a los falangistas de espionaje en favor de Berlín.
A partir de Abril de 1939,con la ilegalización de Falange, esta organización encubrió su actividad tras el "Auxilio Social",sin embargo, el reconocimiento del gobierno de Franco por Cuba el 6 de Junio de 1939 marcó el final para los falangistas que se convirtieron en una dificultad para la normalización de relaciones entre ambos países principios de 1941 desde Madrid se decidió un repliegue táctico de la Falange Exterior de modo que en julio de 1941 cuando Francisco Alvarez García,secreatrio de la Falange cubana fue expulsado,se decidió que siguiera ostentando su cargo desde España.

Cuba vivía un clima interno de euforia por la normalización democrática que se vivía tras la convocatoria de elecciones en la que por vez primera participaría el Partido Comunista.La España franquista pasaba a ser un país plenamente reconocido por Cuba y a su vez, esta aceptaba su papel de refugio de miles de españoles que se exiliaron en este país.




RELACIONES HISPANOCUBANAS DURANTE LA GUERRA CIVIL

La independencia cubana respecto de España en 1898 generó un nuevo marco de relaciones entre ambas naciones pero en ningún caso propició animadversión hacia lo español en la isla.Era tal el calado de la cultura y la economía española en la historia reciente de Cuba que al producirse el inicio de la guerra civil en España se asistió a un proceso de polarización en las simpatías hacia los bandos contendientes que se desarrolló en un clima de supuesta neutralidad del gobierno cubano.

En primer lugar observamos como la emigración española a Cuba siguió un proceso de crecimiento en los primeros años del siglo de modo que entre 1902 y 1928 la llegada de españoles a Cuba se cifró en una media anual de 45.000 por lo que se logró alcanzar una cifra de emigrados en torno a 1.200.000 personas aunque no todos eran emigrantes permanentes ya que muchos de estos practicaron una emigración estacional.La crisis económica de 1929 que tan graves consecuencias implicó para las exportaciones azucareras de Cuba,tuvo una consecuencia inmedíata en las oportunidades laborales, lo que dio lugar a una caída en picado de la emigración que entre 1928 y 1933 apenas superó los 20.000 españoles.Esta situación empeoró en 1933 con la llegada del gobierno progresista que sucedió a Machado en el que se dictaron medidas proteccionistas en el plano laboral;la ley conocida como "del 50%" suponía que al menos la mitad de de la mano de obra de las empresas fuese cubana.En 1936 la colonia española residente en Cuba representaba unas 225.000 personas.

Aunque el retroceso es rotundo hay que analizar esta situación considerando que miles de españoles optaron por la nacionalidad cubana y que miles de familias estaban conformadas por individuos de ambos lados del Atlántico.Al iniciarse la guerra de España, la colonia española en Cuba gozaba de un importante volumen de negocio, sobre todo del pequeño y mediano comercio y suponía uno de los motores del desarrollo cubano y de algún modo, un medio para contrarrestar la penetración económica de los Estados Unidos en Cuba.Igualmente hay que considerar un factor coyuntural ya que la proclamación de la República en España se produjo en 1931 y la caída de Machado y la llegaba del gobierno progresista de Grau San Martín en 1933.Quiere decir esto que desde mediados los años veinte y principio de la década de los treinta, tanto Cuba como España se vieron inmersas en procesos de agitación popular paralelos.Cuando estalla la guerra civil la sociedad cubana se decantó mayoritariamente a favor de la República española con su punta de lanza en los movimientos de izquierda y la mayor parte de la intelectualidad de la isla.En cuanto a los apoyos del bando sublevado, estos fueron muy escasos y procedieron de grupos de industriales y profesionales liberales que se encontraban cercanos a círculos políticos de derechas como el "Partido Demócrata Republicano"presidido por el General Menocal.Esto tiene su explicación en cuanto que la oligarquía terrateniente centraba su atención en Estados Unidos que como veremos más adelante mostró una neutralidad levemente favorable al gobierno de la República pero siempre mostró sus reservas ante el papel de los comunistas en el conflicto español.Por último, un factor determinante como era la iglesia católica, en Cuba tenía una implantación relativa y por tanto no actuó como un elemento favorable para los apoyos al bando sublevado.
La calle respiraba de modo desigual respecto de la guerra española y frente a las movilizaciones masivas de las izquierdas a favor de los republicanos,los apoyos al bando alzado procedían sobre todo del ultra conservador "Diario de la Marina" aunque a continuación observaremos como no se trató de un comportamiento lineal ya que durante el conflicto español cambio sensiblemente sus discurso.
La actitud del gobierno de Cuba estuvo marcada formalmente por la neutralidad durante todo el conflicto, pero a lo largo del mismo osciló en sus apoyos hacia uno u otro bando.Al estallar la guerra española, el presidente cubano era Miguel Mariano Gomez aunque el hombre de referencia de ese Gobierno ya era Fulgencio Batista.Este último ,presionó al Gobierno cubano al inicio del conflicto español de modo que aún manteniendo una pantalla de neutralidad se favoreciera en cierta medida al bando franquista.Esta actitud posiblemente respondía a su cercanía ideológica con los alzados y a las presiones de los sectores económicos influyentes con intereses en España, pero a decir verdad,Batista oscilará en sus apoyos a los bandos contendientes en función de diversos argumentos como la posición de Estados Unidos, las presiones internas,la posición de los países del entorno y los propios intereses comerciales cubanos en España.
Al inicio de la guerra observamos como desde septiembre de 1936 el gobierno cubano obstaculizó el embarque de combatientes y ayudas con destino a la República española.Igualmente fueron clausuradas algunas asociaciones pro republicanas y como incidente más significativo se inmovilizó en el puerto de La Habana al buque español"Manuel Arnús" en el que se produjo un enfrentamiento entre capitán junto a sus oficiales frente a un "Comité Revolucionario" formado por marineros, lo que generó un conflicto sobre la titularidad del barco.Esta neutralidad tendenciosa tuvo su punto culminante con la llegada de Miguel Espeliús,enviado por el gobierno de Burgos a Cuba con la idea de desplazar a las autoridades diplomáticas de la España republicana.Esta situación dio lugar a grandes protestas en los medios de comunicación y provocó que el Embajador legítimo de España abandonase temporalmente Cuba ante la posición del Gobierno cubano que a pesar de no reconocer a esta nueva autoridad española la toleró sin más.

Sin embargo, el problema español formaba parte de la agenda diaria del Gobierno cubano por la desestabilización interna que suponía y a mediados de 1937 observamos como se dan pasos concretos para hacer cambiar de orientación la neutralidad oficial que desde este momento favorecerá a la España republicana.En octubre de 1937 en un encuentro latinoamericano los representantes cubanos sacaron a la luz un documento que técnicamente podríamos definir como una propuesta de arbitraje de los países de Hispanoamérica en el conflicto español.Mexico se sumó con reservas a esta idea y en adelante ambos países serán el núcleo de apoyos más sólido con que cuente el Gobierno de Madrid en la zona junto con Perú,Uruguay y Haití.Posiblemente este cambio de actitud de Cuba tenía mucho que ver con las presiones de Estados Unidos para que no se favoreciera al bando franquista que por otra parte podía ser a la larga un competidor de los intereses norteamericanos en el Caribe.Mexico que nunca tuvo dudas de sus apoyos al gobierno de Madrid, aceptó con reservas la propuesta cubana como un modo de contrarrestar el aislamiento internacional al que estaba siendo sometida la República española bajo la excusa de ser sovietizada.Tras esta toma de posiciones,los agentes del gobierno de Burgos no volverían a ser recibidos en ninguna instancia oficial.El Gobierno de Madrid nombró un nuevo Embajador y su representación en Cuba quedó plenamente restituida.Otros signos externos del cambio de orientación del Gobierno cubano fue la donación estatal a la causa republicana del 5% de los impuestos recaudados en el comercio de tabaco y azúcar y la ilegalización de las organizaciones políticas que como la Falange venían haciendo campaña en favor de Franco y sus Generales.Este cambio de actitud tuvo considerables réditos políticos para Batista, cuyos apoyos se extendieron a los grupos nacionalistas que vieron en su acercamiento a México un gesto de anti injerencismo hacia los norteamericanos.Esta política se vio refrendada una vez más en Diciembre de 1938 en la Conferencia Panamericana celebrada en Lima.

Asistimos por tanto a un complejo juego de la alta política cubana con Batista a la cabeza, en el que desde una posición de neutralidad oficial se desarrolla una política de hechos contradictorios, primero con la tolerancia del bando sublevado y más tarde con el repudio de estos y la adopción de una posición de mediación que encuentra apoyos en México y tolerancia en Estados Unidos que alentaba las posiciones contrarias al auge de los fascismos.
Pero Cuba jugará a dos barajas y no dará por perdida la batalla comercial.En 1926 se había firmado un tratado comercial entre Cuba y España y con la llegada de la guerra,fundamentalmente el sector de empresarios del tabaco cubano comenzó a inquietarse,primero por la ruptura de relaciones con la mitad de sus clientes en España y en segundo lugar por el bloqueo de los pagos pendientes que se encontraban bloqueados por las autoridades franquistas.Será en este contexto en el que a pesar de la neutralidad favorable a los republicanos,se den los pasos necesarios para sondear al gobierno de Burgos sobre la posibilidad de que aquellos admitieran el envío de un representante cubano.Finalmente Burgos accede y La Habana elige a un peso pesado de su política exterior para el cargo.Además de desbloquear la deuda pendiente y la normalización de las relaciones comerciales de las empresas cubanas en España, esta designación sentaba las bases del doble juego cubano que bajo la apariencia de una negociación comercial envía a Carlos Armestos Cárdenas,delegado cubano en la Sociedad de Naciones y ex Embajador en Roma.Armestos desplegará toda su potencial negociador pero no logrará que el Gobierno de Burgos se sobreponga a su irritación tras la expulsión de su enviado a La Habana Miguel Espeliús.España seguía siendo uno de los mejores clientes del tabaco cubano que representaba el 85% de las compras españolas a Cuba,sin embargo al inicio de la guerra el comercio con la zona republicana quedó interrumpido y el Gobierno de Burgos había bloqueado los créditos de los tabaqueros cubanos en España, utilizándolos en su beneficio ante la falta de liquidez en divisas que implicaba la guerra.El volumen de deuda que desde España se mantenía con los comerciantes cubanos ascendía a la finalización de la guerra a una cantidad algo superior al millón de dólares.Puede observarse por tanto como se mantiene abierta la puerta a la normalización diplomática
,tendiendo puentes hacia ambos bandos en conflicto aunque estos no siempre fructifiquen.Una buena prueba de esta ambigüedad será el discurso mantenido por el nuevo representante cubano ante la Sociedad de Naciones en Ginebra; Juan Angustias, que hilará fino para mostrar su repulsa a la guerra, la ofertas de arbitraje hispanoamericano propuesta por Cuba, pero en definitiva, no dará pistas sobre la posición real del Gobierno cubano
Mientras todo esto sucedía, el Gobierno cubano mantenía abierta su representación diplomática en Madrid que desde el inicio del conflicto estuvo encabezada por su encargado de negocios Manuel Serafín Pichardo.Es sabida la compleja situación que vivirán durante toda la guerra las Embajadas que se mantuvieron en un Madrid cercado que vivió momentos de auténtica tensión con las representaciones extranjeras a las que en muchos casos se acusó de albergar a miembros de la llamada "Quinta Columna" de los sublevados, lo que dio lugar a su asalto, unas veces de modo incontrolado por grupos de milicianos y en otras, bajo la propia responsabilidad del Gobierno republicano,ese fue el caso de las legaciones de Finlandia, Perú y Turquía.En este contexto, la Embajada cubana desarrolló una intensa labor humanitaria acogiendo a docenas de peticionarios de asilo, una figura que las autoridades cubanas respetaban como muestra el pronunciamiento de la Secretaría de Estado cubana en septiembre de 1936 quien se pronunció sobre el derecho al asilo, invocando el convenio que ambas naciones habían firmado en La Habana.El asilo diplomático alcanzó cifras inéditas durante la guerra civil española con un número superior a los 10.000 refugiados en al menos treinta embajadas.

La actuación de las autoridades cubanas en Madrid estuvo marcada en todo momento por un carácter humanitario de modo que en los primeros meses de la guerra comenzó a asilar a docenas de personas en sus edificios, la mayoría de ellos miembros o simpatizantes de los sublevados aunque también recibió peticiones de asilo por parte de significados republicanos en los peores momentos del cerco de Madrid.La labor de estos diplomáticos pasó en primer lugar por la evacuación de los cubanos residentes en España, situación que se precipitó tras la decisión de las autoridades republicanas de la evacuación de Madrid.En los primeros meses de la guerra se organizaron cuatro expediciones de ciudadanos cubanos que fueron trasladados hasta los puertos de Valencia y Alicante y desde allí trasladados al puerto francés de Marsella.Sin embargo, esta labor será solventada en la primera etapa de la guerra, siendo los asilados la principal preocupación de la legación cubana en Madrid.Inicialmente el asunto se llevó con discreción y las autoridades republicanas no ejercieron demasiada presión sobre las actividades desarrolladas por los diplomáticos cubanos, sin embargo un incidente producido en el puerto de La Habana complicó esta situación.Se trató del caso del buque "Manuel Arnús",un barco que al inicio de la guerra había sido confiscado por las autoridades de la Generalitat de Cataluña.El barco partió de Barcelona con dirección a México y a las pocas horas de navegación asistió al enfrentamiento entre un grupo de marineros frente al capitán y los oficiales del barco por hacerse con el control del mismo.Los marineros crearon un "Comité Revolucionario" y tomaron el control del barco.En una escala técnica en La Habana, el capitán solicitó la intervención de las autoridades cubanas que tras una inspección de la nave decidieron la inmovilización de esta hasta aclarar lo ocurido.Lo cierto es que este incidente se convirtió en una fuerte disputa entre las autoridades cubanas y las españolas con gran repercusión en la prensa cubana y la polarización de la colonia española sobre el destino final del barco.Esta situación sirvió como elemento de presión a la legación cubana en Madrid y el futuro de los asilados en ella.El incidente del "Manuel Arnús" duró media guerra, nada menos que diecisiete meses, optándose finalmente por entregar el barco al Cónsul español en La Habana.En esta decisión pesó especialmente la suerte de los refugiados en la embajada madrileña.
Mientras tanto la situación en las sedes diplomáticas cubanas en Madrid pasaba por momentos de tensión ante la incesante llegada de refugiados y la falta de condiciones para atenderlos.Este panorama se vio sensiblemente aliviado por los canjes de prisioneros en los que intervino la diplomacia cubana la cual posibilitó la salida de muchos refugiados.
Desde marzo de 1937 y tras el fallecimiento de Manuel Serafín Pichardo,será Ramón Estalella quien esté al frente de la diplomacia cubana en Madrid.Estalella formaba parte de esta representación desde 1918 y gozaba de excelentes relaciones tanto con el resto del cuerpo diplomático como con las autoridades republicanas y como se verá más tarde con las altas jerarquías de los sublevados, lo que unido a su talante humanitario y a su incansable actividad hicieron de este diplomático la persona clave durante los tres largos años del asedio sobre Madrid.
Respecto de los voluntarios cubanos presos en cárceles nacionales, el cambio de rumbo en la política cubana posibilitó que desde La Habana se interesaran por la situación de los mismos.Con fecha 11 de julio de 1938,la Secretaría de Estado cubana,altamente satisfecha por la labor que Ramón Estalella realizaba en lo referente a canjes,instó a su diplomático a negociar una operación de intercambio en la que estuviesen incluidos cuarenta cubanos prisioneros en el campo de concentración que el bando franquista mantenía en San Pedro de Cardeña en Burgos.Estalella mantuvo reuniones con las autoridades de ambos bandos,viajó a Barcelona comprometiendo a altos responsables del Gobierno republicano,fundamentalmente a Giral, e hizo lo propio en Irún,cuyo Comandante militar Sanz Agüero se había visto beneficiado por Estalella con el canje de una familiar directa, y tras muchas vicisitudes logró un compromiso para canjear a 40 prisioneros cubanos y 13 suizos.Aunque la operación se realizó en varias entregas y se produjeron diversas incidencias en el proceso,Estalella logró que los cubanos prisioneros en la zona rebelde fuesen repatriados.La primera dificultad que encontró fue la negativa del gobierno de Barcelona a que en estos canjes solo se incluyese extranjeros ya que pretendía la liberación de altas personalidades de la España republicana,tanto militares como civiles que se encontraban prisioneros en la zona franquista.Para esta operación se contó con el apoyo de la diplomacia británica que ofreció un barco como medio para transportar a los canjeados desde un puerto del norte,sin embargo como narra José María Fernández Souto,uno de los supervivientes cuando se desarrolló la investigación de este libro en los meses de octubre y noviembre de 2005,aquello fue verdaderamente dramático.Souto se encontraba en el campo de concentración franquista de San Pedro de Cardeña en Burgos donde había sido internado tras la caída del frente cántabro en el que pasó la mitad de la guerra.Recuerda Souto que tras largas negociaciones decidieron canjear a un grupo de combatientes extranjeros,la mayoría de ellos cubanos, en total quince,para lo que fueron conducidos con una fuerte escolta hasta un punto de la frontera a la altura de Biarritz,pero finalmente la operación fracasó.No sabía explicar Fernández Souto cual fue la causa de esta marcha atrás, sin embargo la operación volvió a intentarse unas semanas más tarde,en esta ocasión con éxito ya que finalmente fue entregado en la frontera a integrantes de la Cruz Roja Internacional que a su vez cruzaron hacia el otro lado con prisioneros italianos.Souto no pasó directamente a Francia ya que entre los acuerdos de la diplomacia cubana se logró salvar el escollo del paso fronterizo con el compromiso de las autoridades franquistas de que los canjeados podrían salir desde un puerto de la España ocupada como así fue,ya que pocas semanas antes del fin de la guerra, Fernández Souto junto a catorce cubanos más fue embarcado en Bilbao en el "Marqués de Comillas" en el que eso sí, hubieron de viajar con grilletes y en pésimas condiciones bajo el control de soldados italianos que los custodiaban.Es justo citar el papel que en este proceso cumplió Dolores Agüero, delegada cubana de la Cruz Roja Internacional que gozaba de un considerable prestigio y contribuyó a desbloquear estas complejas negociaciones
La destitución como presidente de la República de Cuba de Miguel Mariano Gómez que entró en colisión con los intereses de Batista y su grupo de presión dio lugar a que fuese nombrado Federico Laredo Bru,su vicepresidente, que tomó posesión el día de navidad de 1936.El gabinete de Laredo Brú,dio un vuelco total al tratamiento de los combatientes cubanos que se encontraban en España de modo que el Secretario de Estado cubano dio instrucciones a sus diplomáticos en Madrid para que intercedieran en la suerte de los prisioneros,muchos de ellos expuestos a fuertes condenas incluso a la penal capital, ese fue el caso de Antonio Ricord,prisionero en la cárcel de Bañeza y el de Herminia Moreno que esperaba juicio en la prisión de Ceuta.Uno de los elementos de presión para la liberación de estos ciudadanos cubanos fue el reconocimiento por parte de Cuba del gobierno de Franco en Junio de 1939 lo que en cierto modo facilitó la salida de combatientes cubanos de las cárceles y campos de concentración españoles si bien algunos casos fueron particularmente complejos en su resolución.Tal es el de Pelayo Cordero, combatiente que al finalizar la guerra se dirigió a la Embajada cubana en Madrid y según su propio testimonio no fue atendido.Su posterior detención le hizo soportar dos años de privación de libertad de cárcel en cárcel hasta que finalmente salió en libertad condicional y en 1945 esta vez con la mediación de las autoridades cubanas logró salir de España.Otro caso peculiar en la actuación de los diplomáticos cubanos en España fue el del combatiente Benjamín Lafarga que quedó embolsado en Alicante en los días finales de la guerra hasta que viéndose cercado acudió al Cónsul cubano en esa ciudad, Alfonso Fernández Sarrasi, quien le informó de la imposibilidad de asistirlo dado que se trataba de un combatiente republicano.Lafarga le hizo saber al Cónsul que trataría de atentar contra la vida de Franco que el 3 de mayo tenía previsto participar en una parada militar en Valencia, esto implicaba un atentado suicida de graves consecuencias por lo que el cónsul logró disuadirlo alegando que ello conllevaría tremendos peligros para los cubanos presos en cárceles franquistas.Finalmente Lafarga logró salir de España con un pasaporte expedido por el consulado cubano en Madrid.Otro caso no menos complicado para los diplomáticos cubanos fue el de Pablo Porras Gener que fue apresado en el puerto de Alicante en el último minuto de la guerra, permaneciendo año y medio en prisión hasta que a finales de 1940 le fue concedida la libertad condicional a condición de que permaneciera en el interior de la Embajada cubana.Los diplomáticos cubanos ante la certeza de que su vida corría un serio peligro organizaron su fuga vía Portugal.
La actividad de los diplomáticos cubanos no cesó hasta la excarcelación de todos los cubanos apresados en España.El encargado de Negocios Estalella visitó en varias ocasiones el campo de San Pedro de Cardeña y el campo de trabajo de Belchite,entregó pequeñas cantidades de dinero a los presos y les entregó correspondencia de sus familiares al tiempo que les informaba de la amplia campaña que se mantenía en Cuba para su retorno.Así mismo consolidó una vía de salida para los grupos que iban alcanzando la libertad, procediendo a su evacuación primero por vía férrea hasta Bilbao donde embarcaban en el "Marqués de Comillas" que devolvió a numerosos cubanos a casa.
El reconocimiento del nuevo Gobierno español por parte de La Habana se produjo nada más terminar la guerra.Previamente, el 18 de Abril, solo dos semanas más tarde de dar por finalizado el conflicto, la Secretaría de Estado cubana presentó públicamente un documento denominado "Libro Gris" en el cual se hacía una exposición que acreditaba la neutralidad cubana durante la guerra española. El factor decisivo en la normalización de relaciones procedía de las presiones del sector exportador y la evidencia de que los vencedores habían consolidado su poder.Precisamente esta fue una de las condiciones impuestas por el Secretario de Estado Cubano Juan Remós al representante del Gobierno de Burgos en La Habana Miguel Espeliús que retornó a la capital cubana para negociar la normalización entre ambas naciones.Fue precisamente la normalización comercial, la negociación de un calendario de pagos de la deuda pendiente con las empresas cubanas y en último término, la puesta en libertad de los cubanos presos en España.Como vimos anteriormente este último asunto se fue solucionando; más complicado fue el pago de las deudas pendientes.Sin embargo, una vez aceptado el compromiso por las dos partes,el 25 de Mayo de 1939 se decidió mantener relaciones plenas y dotar a ambas naciones de cuerpo diplomático acreditado.España y Cuba iniciaban el camino de la normalización el 12 de Junio de 1939,sin embargo la llegada de la segunda guerra mundial complicó de nuevo las relacioneses,fundamentalmente por la actividad en Cuba de la llamada "Falange Exterior".